El presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, insistió este viernes en Arrecife, donde realiza una visita oficial, en que el Ejecutivo pondrá en marcha medidas para salvar unos 35.000 empleos que se encuentran en riesgo en sectores del comercio, turismo o construcción proponiendo a los empresarios y sindicatos la eliminación de las horas extra, una medida que ya se aplica desde hace un año en La Palma. La Comunidad Autónoma está dispuesta a aportar entre 50 y 60 millones al margen de los que ya ofrece la normativa.
En el encuentro que Rivero mantiene con los medios de comunicación esta mañana en Lanzarote, sostuvo de nuevo, como ya hiciera este jueves en su intervención en el Parlamento regional, que una de las medidas para contribuir al descenso del paro en Canarias es la de priorizar el empleo para las personas que lleven tres años residiendo en las Islas y en las familias con todos sus miembros en paro.
Además, Rivero apuesta por lo que ha llamado “flexiguridad”, que tendría que llevarse a cabo tras el consenso entre los sindicatos y empresarios, consistente en rebajar la jornada laboral de algunos empleados en una hora para dedicarla a formación. La diferencia en la rebaja salarial será asumida por el Gobierno de Canarias, según el compromiso manifestado por el presidente.