MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
Manuel Pimentel ha convocado esta tarde a la mesa negociadora del II convenio colectivo para iniciar el proceso de arbitraje acordado entre AENA y el sindicato USCA, que agrupa al 97% de los 2.400 controladores que el ente tiene en plantilla, una vez ha concluido sin acuerdo el plazo fijado por ambas partes para la negociación.
La primera reunión tendrá lugar esta tarde sobre las 16.30 horas en la Dirección General de Empleo del Ministerio de Trabajo, informó el Ministerio de Fomento.
De esta forma el ex ministro Pimentel tomará las riendas de la negociación, en la que estará asesorado por dos abogados que representan a las partes implicadas.
Ambas partes se reunieron el lunes en un último intento por cerrar los flecos de la negociación en una jornada maratoniana, aunque finalmente el encuentro terminó sin acuerdo.
El ministro de Fomento, José Blanco, aseguró este martes que recurrir al laudo arbitral supone estar “en la antesala” de tener un nuevo convenio para el colectivo de controladores tras siete años de negociaciones.
Este nuevo convenio resolverá “una situación que estaba enquistada”, señaló Blanco en declaraciones a la cadena Cope, quien mostró confianza absoluta en que el árbitro Manuel Pimentel “hará un buen trabajo y un buen laudo”.
Fuentes cercanas a la negociación indicaron que AENA y USCA habrían acordado cerca del 70% del contenido del II convenio colectivo, de forma que el tercio restante se someterá al laudo arbitral.
Entre las cuestiones pendientes quedan temas relacionadas con las condiciones de trabajo del colectivo, tales como el número de horas de trabajo, la distribución de los turnos o la formación de nuevos controladores aéreos.
Por contra, sí está cerrada la masa salarial, fijada en 480 millones de euros para 2010 y en torno a los 460 millones de euros para años sucesivos, según el pacto firmado entre AENA y controladores el pasado mes de agosto. Faltaría por definir su reparto, que la compañía quiere vincular a los objetivos de producción.
También está acordada la jornada, establecida en 1.670 horas, y programable en función de los centros de dependencia en cuatro niveles (1.200 horas, 1.300, 1.400 o de 1.500 horas).
UN MES PARA EMITIR EL LAUDO.
Pimentel dispondrá de un mes, hasta el próximo 28 de febrero, para emitir el correspondiente laudo (sentencia) --que es de obligado cumplimiento, no recurrible y ejecutable-- sobre las materias que no hayan sido acordadas en la mesa de negociación del convenio colectivo.
El uso de este procedimiento tiene un precedente en el sector en 2001, para la resolución del conflicto sobre el convenio colectivo de los pilotos de Iberia. Entonces, el Ministerio de Fomento designó como árbitro al presidente en funciones del Comité Económico y Social (CES), Federico Durán López, quién determinó que las partes debían firmar un convenio a cuatro años con subidas salariales vinculadas a la marcha de la compañía.
El último convenio con los controladores se firmó en 1999 y finalizó su vigencia en 2004. El futuro convenio colectivo de este sector deberá encajar con lo dispuesto en el Real Decreto aprobado el 5 de febrero de 2010, que otorgó a AENA el control de la gestión laboral de los controladores aéreos que hasta entones les pertenecía.
El decreto, que entró en vigor el 15 de abril, reguló las condiciones laborales de los controladores civiles de tránsito aéreo, estableciendo una nueva organización del trabajo --horas laborales y de descanso-- y rebajando el salario del colectivo hasta una media de 200.000 euros al año.