La asociación de productores de plátano de Canarias, Asprocan, asegura haber logrado el compromiso de la Dirección General de Comercio de la Comisión Europea de que no se barajará el arancel que en la actualidad grava la importación de bananas en Europa con 75 euros por tonelada.
Representantes de Asprocan se han reunido esta semana en Bruselas con representantes de la Comisión y con eurodiputados de Francia, Portugal y España (los tres países con regiones ultraperiféricas donde está radicados los cultivos europeos de plátano y banana) para expresarles su preocupación por la situación del sector.
De su reunión con la Dirección General de Comercio, los productores canarios salen con la impresión de que la Comisión Europea comparte con ellos que existe una diferencia entre las producciones europeas y las latinoamericanas tanto en calidad, como en “cumplimiento de los compromisos sociales y medioambientales”.
En cuanto a su encuentro con los parlamentarios, Asprocan asegura que los eurodiputados de los tres países con regiones ultraperiféricas están de acuerdo en que urge aplicar “una regulación justa del mercado para reemplazar el actual mecanismo de estabilización, que ha demostrado ser completamente ineficaz”.
Y también, añade, coinciden en que es necesario “establecer la obligación de que todas las importaciones agrícolas provengan de fuentes que cumplan con las mismas reglas que se imponen a los productores europeos, especialmente con respecto al uso de productos fitosanitarios, con el objetivo de evitar la actual competencia desleal a la que debe hacer frente el sector”.
“Debemos poder tener mecanismos realistas adaptados a las particularidades de nuestras regiones ultraperiféricas, en las que somos un sector clave a nivel social y económico. Estamos luchando por librar una batalla justa con nuestra competencia, pero debemos poder hacerlo en las mismas condiciones en el mercado europeo”, dice el presidente de Asprocan, Domingo Martín Ortega, en un comunicado.
Europa produce y vende aproximadamente 700.000 toneladas de plátanos de acuerdo con las regulaciones europeas, que se encuentran entre las más estrictas del mundo, señalan los agricultores canarios.
Sin embargo, al mismo tiempo el mercado europeo importa de otros países cada año 6,5 millones de toneladas de bananas, en su gran mayoría de países América Latina (el 75%).
“Pero los productores de banana de terceros países no están sujetos a las mismas regulaciones sociales, medioambientales, fitosanitarias y de seguridad alimentaria que sus homólogos europeos. Esto tiene como consecuencia una competencia desleal de los productores de banana de las RUP respecto a terceros países, quienes suministran grandes cantidades a este mercado ya sobresaturado y que han obtenido importantes concesiones arancelarias, amenazando así la supervivencia de los plátanos europeos a corto plazo”, se queja Asprocan.