El Consejo Insular de Aguas del Cabildo de Gran Canaria ha cifrado en aproximadamente 780.000 metros cúbicos la cantidad de agua que la lluvia de la pasada semana ha dejado en las presas, pero solo en las que están ubicadas en la zona norte y oeste de la Isla. En el sur no ha caído prácticamente nada de lluvia y las presas más grandes e importantes de Gran Canaria continúan en la misma dinámica descendente de casi todo 2017.
De las siete presas públicas de Gran Canaria, solo dos han incrementado su nivel de forma significativa por las lluvias de este enero: en la de Candelaria (Artenara) han entrado 90.000 metros cúbicos de agua, aumentando del 11% al 34%; el Vaquero (Tirma) ha pasado de estar casi en mínimos a llegar a cerca de la mitad de su capacidad (115.000 de los 267.000 metros cúbicos que puede albergar). A pesar del aumento en estos dos embalses, en el global continúan al mismo nivel con el que finalizaron 2017: el 12%, un dato que confirma la resignación con la que los agricultores aceptaron desde el verano pasado un año “catastrófico”.
En las privadas, la Comunidad de Regantes del Norte ha acumulado en las presas de Lugarejos, Los Pérez, Las Hoyas y Las Garzas unos 364.000 metros cúbicos. Por su parte, la Comunidad de Regantes de La Aldea ha sumado 300.000 entre Siberio, Parralilo y Caideros de Las Niñas.
La lluvia caída en las presas permitirá “regar durante más de tres meses en el norte y oeste de la Isla”, según explicó el consejero de Sector Primario y Soberanía Alimentaria del Cabildo de Gran Canaria, Miguel Hidalgo, a través de un comunicado.
Presas vacías en el sur
Algunas de las grandes presas públicas del sur grancanario se encuentran prácticamente vacías, como es el caso de Fataga o Ayagaures, que están al 1% de su capacidad. En Soria, embalse semipúblico con 12.924.960 metros cúbicos de capacidad y 120 metros de altura, está sólo al 0,25% con 32.460 m3 de agua.
Juan Hérnandez, secretario insular de la Confederación de Organizaciones Agrarias y Ganaderas, ha afirmado que el sur, que se abastece a través de la depuración y desalación del agua, “sigue igual” y cree que “hasta el próximo sábado la lluvia, si es que sigue lloviendo, se quedará anclada en el norte. Al sur si no le viene un buen temporal de atrás no suele recoger agua de este tipo de tiempo”.
A pesar de la sequía del sur grancanario, los cultivos de los agricultores tienen asegurado el riego como mínimo hasta el 1 de octubre gracias a la inversión de 1,4 millones de euros del Cabildo de Gran Canaria para trasvasar 920.000 metros cúbicos de agua.
Si durante el año 2018 el nivel del agua de estas presas no mejora, el Consejo Insular tiene planeado transportar 1.200.000 metros cúbicos más, una cantidad que, unido a lo que queda en los embalses, permitirá regar cultivos todo el año.