Las baterías inteligentes de la empresa valenciana Ampere Energy han aterrizado este jueves en Canarias, donde las condiciones climáticas hacen “idónea” la instalación de fuentes renovables y de este tipo de tecnología, que supone para los consumidores un ahorro en la factura de la luz.
La propuesta inicial es sencilla, según explica el presidente de la entidad, Pablo Segura: “seamos los gestores de nuestra propia energía”. Una iniciativa que se consigue a base de dos elementos fundamentales, como lo son el litio y el software.
Se trata de una serie de baterías de distintos tamaños y capacidad de almacenaje, que se adapta mercado eléctrico para comprar energía en el momento en el que ésta sale más barata – entre la medianoche y las 11:00 horas- para luego poder utilizar lo almacenado durante la tarde y la noche, cuando la demanda es mayor y por lo tanto cuesta más el kilovatio por hora (KWh). El cerebro del sistema cuenta con una aplicación que permite mejorar los hábitos de consumo, ya sea a escala doméstica o al nivel de un gran consumidor, como puede ser una empresa.
Este tipo de baterías pueden almacenar energía proveniente de la propia red o de fuentes renovables, como placas solares instaladas en el tejado de una vivienda familiar (la normativa impide que las comunidades vecinales compartan este tipo de recursos).
Segura señala que el sistema ya se comercializa en otras partes de España, además de Alemania, Portugal y próximamente en Italia. Las condiciones del sector fotovoltaico hicieron que la empresa pusiera el punto de mira en el Archipiélago, donde las baterías harían el tándem perfecto con unos paneles solares.
Esta última opción, indica, supondría un ahorro de entre un 60% y un 80% de la factura eléctrica. Conectar directamente el equipo a la red eléctrica, por otro lado, rebajaría la cuenta en un 50%, gracias a la compra de energía en las horas más baratas. Algo que se puede monitorizar a través de una aplicación móvil.
En referencia al retorno de la inversión, señala que a medida que pase el tiempo los equipos se irán abaratando y hace hincapié en la financiación que ofertan bancos y administraciones públicas para instalar este tipo de tecnología, que se enmarca en la mejora del medio ambiente. La inversión inicial, explica, ronda en la actualidad los 5.000 euros.
Segura considera que el fomento del autoconsumo pasa a través de un incremento de las subvenciones por parte de las instituciones públicas, teniendo en cuenta los avances que la política internacional trata de dar para disminuir las emisiones de gases contaminantes.
La empresa SM Advance Energy – que desarrolla y promueve proyectos de ingeniería y soluciones solares, eólicas, de iluminación y de eficiencia energética - que fundó Santiago Marrero y se encuentra en Las Palmas de Gran Canaria, comercializará las baterías.
Marrero se muestra sorprendido por la acogida y el interés de los canarios por estos sistemas, aunque reconoce que existe falta de información al respecto. Asegura recomendar este tipo de equipos por tener una baja incidencia en el medio ambiente y porque, una vez amortizado, el precio de la energía se reduce considerablemente.