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La decepción de Coalición Canaria

Dácil Jiménez

Santa Cruz de Tenerife —

Amenazaba con caer una lluvia intensa sobre Tenerife este domingo... y así fue. Desde las 18.00 horas no paró de llover y tal vez por ese motivo pocas personas se decidieron a acercarse hasta el local en Santa Cruz en el que Coalición Canaria esperaba los resultados definitivos de estas generales. Tal vez fue la lluvia... o tal vez fueron los resultados: un solo escaño, el de Ana Oramas.

La sensación mientras se esperaba el reparto final de escaños era la de que la fiesta se estaba viviendo en otra parte, en otras sedes, pero no aquí. Y a esta impresión ayudaba el hecho de que en la sala donde una treintena de periodistas seguía desde media tarde el avance de la jornada electoral no había ninguna pantalla desde la que seguir el desarrollo de los acontecimientos, tan emocionantes en una noche en la que se ha puesto punto final al bipartidismo. Pocos simpatizantes y pocas cabezas visibles de Coalición durante la tarde. Solo Cristina Valido, consejera del Cabildo de Tenerife, y José Miguel Ruano, secretario de organización de CC, hicieron algunas declaraciones cuando comenzó el recuento en las Islas. Y poco a poco se fue confirmando lo que ya anunciaban los sondeos desde hace días: la formación nacionalista pierde un escaño de los dos que cosechó para el Parlamento en 2011. Dicho con otras palabras, obtiene solo la mitad de la representación que logró hace cuatro años. Han sido más de 70.000 votos menos.

No son unos buenos resultados, pero tal y como señalaron Ana Oramas y el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, a su llegada a la sede pasadas las 22.00 horas, otros partidos como el BNG se han quedado fuera. La valoración ha sido, por supuesto, positiva. Ya se sabe que en unas elecciones nunca hay un resultado malo, así que la pérdida de votos se ha traducido como que la formación canaria ha logrado “aguantar la embestida”. Según Oramas “ha sido una campaña extenuante” y “Coalición no ha tenido la presencia que han tenido otros partidos en las tertulias de los medios nacionales”, ha dicho. Aunque intentasen traducir la consecución de ese escaño como un triunfo, las caras, tal vez por el cansancio, tal vez de nuevo por los resultados, no eran precisamente de alegría. Sonrisas sí, pero no alegría. “Nos hubiera gustado mayor presencia” [en el Congreso], aseguraba Oramas al filo de las 23.00 horas cuando aún no se conocían los resultados definitivos para el Senado, “pero al menos Canarias, que no Coalición, sigue presente en Madrid”, ha dicho.

No hubo champán ni grandes celebraciones, solo algunas declaraciones. “Hay que hacer una gran reflexión. Tenemos que valorar por qué no hemos llegado a los resultados de las autonómicas, por qué hemos perdido músculo y hacer una reflexión sobre nuestros propios errores, isla por isla, y sacar conclusiones. Hay que hacer una renovación”, concluía el secretario general del partido, José Miguel Barragán cuando se confirmaba también un retroceso en la Cámara Alta. “Son los peores resultados de la historia de Coalición”, concluía. Después se apagaron los focos. La lluvia seguía cayendo sobre Santa Cruz y poco a poco los periodistas también nos marchamos.