Las autoridades de Bahréin empezaron este miércoles a liberar a los presos políticos, incluidos 23 presuntos golpistas acusados de haber intentado derrocar a la monarquía, según informaron fuentes parlamentarias de la oposición chií.
“Es una medida positiva”, declaró a Reuters un miembro del partido Wefaq, Ibrahim Mattar. Más de cien presos fueron liberados antes del amanecer, pero todavía permanecen decenas en prisión. Entre los excarcelados hay 21 delincuentes comunes, agregó.
Decenas de miles de bahreiníes se han manifestado por las calles de la capital del emirato, Manama, en la que ha sido la protesta más multitudinaria desde que comenzaron las revueltas populares contra el régimen monárquico.
Los asistentes corearon lemas como “No chií, no suní, solo bahreiní”, así como “El régimen debe marcharse”. La marcha estuvo encabezada por los equipos sanitarios de urgencia que atendieron a algunos de los heridos el jueves pasado en la plaza de La Perla, escenario de los enfrentamientos con las fuerzas del orden.
El lunes ya se concentraron en dicha plaza miles de manifestantes. Desde que el sábado se retiraran los militares, familias enteras permanecen acampadas en este punto a las afueras de Manama.
Huir de la “polarización”
El rey, Hamad bin Isa al Jalifa, asegura tener intención de impulsar un “diálogo nacional” con el que se comprometan todos los bahreiníes, a quienes ha pedido que “huyan de la polarización”. Con este fin, ha dado comienzo a las reuniones con opositores, representantes de la sociedad civil y empresarios “de todas las facciones sociales”.
Asimismo, ha explicado que el diálogo nacional tiene por objetivo dar a todo el mundo la oportunidad de contribuir a las próximas reformas.
También el martes, el rey Hamad ordenó la liberación de varios presos políticos y el cierre de los procesos judiciales contra varios opositores chiíes en el exilio. Por otro lado, el monarca ha señalado que evitará que el sectarismo eche raíces en Bahréin.
Gracias al cambio de postura oficial, Hasan Mushaima, líder del movimiento Haq, tenía intención de acabar este mismo martes con su exilio en Londres y llegar a última hora a Bahréin. Mushaima ya ha adelantado que apoyará a los manifestantes, aunque finalmente se conformen con un “nuevo sistema en una monarquía constitucional”.
La CNN informa de que el histórico dirigente opositor ha sido interrogado en Beirut por efectivos de seguridad aeroportuaria, lo que ha retrasado su regreso al emirato. Haq es más extremista que el partido opositor Wefaq, el cual cuenta con 18 diputados en un Parlamento de 40 miembros.