El director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, ha sido detenido minutos antes de que tomara un vuelo con destino a París en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York. Strauss-Kahn ha sido acusado de agredir sexualmente a una trabajadora del hotel en el que se alojaba en la ciudad estadounidense, según ha informado The New York Times.
El portavoz de la Policía de Nueva York, Paul Browne, ha indicado que Strauss-Kahn se encuentra bajo custodia y que está siendo interrogado sobre dicha acusación. Browne ha señalado que la mujer que ha firmado la denuncia es una mujer de 32 años que trabaja como limpiadora en el hotel y que huyó de la habitación después del incidente.
“El Departamento de Policía de Nueva York descubrió que (Strauss-Kahn) había abandonado el hotel, dejándose el teléfono móvil en la habitación”, ha añadido. “Supimos que estaba en un avión de Air France. Retrasaron el despegue para que pudiéramos sacarle del avión y ahora se encuentra bajo custodia para el interrogatorio”, ha dicho Browne. Además, ha agregado que Strauss-Kahn no ha sido aún acusado de ningún cargo.
La Policía ha informado de que el supuesto incidente tuvo lugar en el hotel Sofitel ubicado en la calle 44 Oeste, cerca de Times Square. “La mujer fue trasladada por el servicio de emergencias médicas al hotel Roosevelt, donde fue tratada de heridas de poca consideración”, ha indicado Browne.
Por su parte, el FMI ha declinado comentar el suceso. Los funcionarios de la junta de la organización han afirmado no haber sido informados de manera oficial del incidente.
Strauss-Kahn, de 62 años, comenzó a dirigir el FMI en noviembre de 2007 y es uno de los posibles candidatos del Partido Socialista francés a las próximas elecciones presidenciales. Anteriormente, era miembros de la Asamblea Nacional francesa y profesor de economía en el Instituto de Estudios Políticos de París.
En octubre de 2008, Strauss-Kahn pidió perdón por un “error de entendimiento” en un affair con una subordinada, pero negó que hubiera abusado de su posición. Strauss-Kahn se disculpó ante sus empleados; la mujer con la que tuvo el affair, Piroska Nagy; y su mujer, la presentadora de televisión Anne Sinclair, por los problemas causados por el suceso.