La disidencia cubana considera que las medidas adoptadas por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, de levantar las restricciones de viajes y del envío de remesas serán insuficientes si el Gobierno de Raúl Castro no flexibiliza sus políticas y elimina las restricciones para recibir dinero y entrar a la isla.
El presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), Elizardo Sánchez, recordó en declaraciones a Europa Press que las personas que viven en Cuba deben pagar un 20% de impuestos por las remesas que reciben desde cualquier parte del mundo, por lo que no descartó que será el Gobierno cubano “el primer beneficiado”.
“Se aplican impuestos directos a las remesas que son abusivos y que nos perjudican enormemente”, explicó Sánchez, quien ve esta decisión de Obama como “positiva”, pero insiste en que no tendrá los efectos deseados “si Cuba no da pasos simétricos”.
Como ejemplo mencionó que los cubanos una vez que reciben el dinero proveniente del exterior deben pagar al Estado impuestos que llegan al 240% “por las mercancías que compran con esas remesas”. “Si el Gobierno cubano no suaviza estas políticas y no acata las normas internacionales, estas medidas de Estados Unidos no tendrán los resultados que todos queremos y eso es lamentable”, agregó.
A este respecto, el representante en España del Movimiento Cristiano de Liberación, Carlos Payá, aclaró que la economía en Cuba está en poder del Estado que es el que decide el valor de la divisa local, lo que podría ser un obstáculo aún mayor. “El Gobierno hará negocio con esto como siempre lo hace, porque ahora decidirá si aumentar el valor que tendrá ese dinero una vez que se transforme a la moneda convertible que se utiliza en Cuba”, lamentó Payá.
Por su parte, el presidente del Partido Socialdemócrata de Cuba, Vladimiro Roca, opinó que, de una u otra manera, el envío de dólares a la isla beneficiará “mucho” a la población que aún intenta recuperarse de los estragos de los huracanes Ike y Gustav.
“La población cubana está en una situación bien difícil y no cabe duda que esto ayudará”, indicó Roca al aplaudir “la seriedad de Obama” al cumplir prontamente las promesas que hizo a los cubanos durante la campaña.
Permiso de viaje
Las restricciones de viajes a la isla también quedaron anuladas y ahora los cubanos-americanos podrán visitar a sus familiares en Cuba cuando lo deseen. Pero quedan aún latentes las condiciones que impone La Habana a los ciudadanos que quieran regresar aunque por turismo.
Sobre este tema, Payá recordó que los cubanos en cualquier parte del mundo deben pagar más de 100 dólares (75 euros) por un permiso de entrada a la isla, más los gastos que implica la emisión del pasaporte. “Se podrían gastar por esos trámites unos 500 dólares (375 euros)”, acotó.
Por esta razón, el representante del Proyecto Varela en España consideró que “el problema sigue estando en Cuba y no en Estados Unidos” como lo ha querido hacer ver el Gobierno de los hermanos Castro en las últimas décadas. “Tener que pagar por ir de visita a tu país y tener que pedir un permiso de entrada es muy injusto”, opinó.
A su juicio, La Habana debe comenzar a “dar pasos” que flexibilicen todas estas medidas que “condenan” a los cubanos a vivir “sometidos” a políticas “injustas”, pues “lo ideal” sería que tanto los que viven fuera como dentro “puedan salir y entrar de Cuba cuando quieran y sin tener que esperar a que el Gobierno les otorgue un permiso”.
Respuesta de Cuba
El vicepresidente de la Unión Liberal Cubana, Antonio Guedes, consideró que es el Gobierno de Raúl Castro el que debe “mover ficha” ahora que la Administración estadounidense ha levantado las restricciones de viaje a Cuba y los límites para el envío de remesas.
Para Guedes, la medida tomada por Obama “lanza un claro mensaje” a La Habana retomando una política que, según recordó, ya abordó Jimmy Carter a finales de los setenta y mantuvieron después Ronald Reagan, George Bush, Bill Clinton y George W. Bush durante sus primeros cuatro años de mandato.
Según opinó, el Gobierno norteamericano ha tomado esta decisión por otras dos razones, que son “la cuestión humanitaria” de las familias cubanas y como cumplimiento de una promesa que hizo el presidente Obama durante su campaña electoral. No obstante, Guedes recordó que Obama no prometió levantar la totalidad del embargo sobre Cuba, ya que consideró que el Gobierno de la isla tendría que hacer avances en materia política, económica y de Derechos Humanos.
Aún así, el vicepresidente de la Unión Liberal Cubana no cree que “mientras los hermanos Castro sigan vivos” se vayan a producir cambios de este tipo en Cuba, y que mientras no se den estos cambios Estados Unidos no levantará el embargo.