NAIROBI, 29 (Reuters/EP)
La estructura de las milicias islamistas somalíes de Al Shabaab se parece cada vez más a la de un “negocio” que genera anualmente entre 70 y 100 millones de dólares gracias a la extorsión y el control aduanero que ejercen sobre los puertos del país africano, empleados tanto para el comercio legal como el contrabando y “aportaciones a la guerra santa o Yihad”, según las estimaciones más conservadoras de un informe de Naciones Unidas.
El documento, además, señala que gran parte de la munición empleada en combate por las fuerzas anti-insurgentes suele acabar en manos de las milicias islamistas.
DOMINIO COMERCIAL
El ciclo de comercio, apunta el informe, está dominado por empresarios somalíes que viven en países miembros del Consejo de Cooperación del Golfo, en especial Dubai.
“Al Shabaab se está convirtiendo, en el sentido más estricto de la palabra, en un negocio: una red de intereses que recorre Somalia, Kenia, Oriente Próximo y va más allá”, indicó. Es tal la influencia del grupo que “incluso aquellos empresarios que no guardan una afinidad ideológica con Al Shabaab no ven con buenos ojos que los islamistas sean derrotados por el Gobierno federal, al que consideran explotador y corrupto”, según el informe.
El informe, además, asegura que Etiopía viola el embargo de armas que pesa en Somalia con su presencia en distintas bases militares esparcidas en el lado somalí de la frontera de ambos países, si bien justifica la misión de ayuda militar de los etíopes al país vecino “de acuerdo con la resolución 1772 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas”.
GOTEO DE MUNICIÓN
El informe estima que existen pruebas de que parte de las armas y de la munición que recibe la fuerza de paz de la Unión Africana en Mogadiscio, la capital (conocida como AMISOM), termina en la zona controlada por los rebeldes del mercado de Bakara.
“De las 11 variedades de munición halladas en Bakara, ocho llevan el mismo número de registro que lotes procedentes de los almacenes de munición de la AMISOM. Más aún, entre las seis variedades de munición incautadas a Al Shabaab, cuatro de ellas tienen el mismo número de lote que la munición de la fuerza de paz”, destacó el texto.
“A pesar de la supervisión de la AMISOM y de los esfuerzos del Gobierno Federal de Transición, la munición sigue escapando de las manos del Gobierno y de sus milicias asociadas, y terminan en un mercado ilícito”, destaca el informe.