Museveni espera ganar las elecciones

RWAKITURA (UGANDA), 18 (Reuters/EP)

El presidente ugandés, Yoweri Museveni, se ha mostrado plenamente confiado de obtener un cuarto mandato en las elecciones y, tras depositar su voto, ha augurado que su respaldo podría ser superior al 80 por ciento.

“Hemos realizado un censo y sabemos cuántos hogares apoyan al (Movimiento de Resistencia Nacional) NRM, y nuestro respaldo es del 84 por ciento”, ha dicho el mandatario, que lleva en el poder desde el año 1986. Los resultados se conocerán en un plazo de 48 horas, según las autoridades electorales.

Su principal rival, el opositor Kizza Besigye, ha vuelto a agitar las sospechas de fraude durante la jornada electoral y ha advertido de “serios problemas” en algunos puntos. La Cooperación Interpartidista publicará sus propios resultados y ya ha anticipado que llamará a salir a la calle si estas cifras no coinciden con las estadísticas oficiales.

“No es momento de volver a los tribunales, nuestro pueblo son los tribunales, ellos decidirán qué hacer con las próximas elecciones”, ha dicho el líder opositor después de depositar su papeleta. En los últimos dos comicios, el Tribunal Supremo reconoció que había habido intimidación contra la oposición, aunque determinó que estos incidentes no alteraron los resultados.

Los observadores de la Unión Europea han destacado que la jornada se ha desarrollado sin incidentes violentos significativos, aunque sí han detectado irregularidades puntuales como urnas mal selladas o personas a las que se les negaba la entrada en su colegio electoral pese a estar registradas.

Cooperación Interpartidista, de la que forman parte cuatro partidos, ha informado de casos de opositores golpeados y desvestidos por soldados, mientras que la Asociación de Periodistas del África Oriental ha indicado que un fotógrafo ha sido disparado en la rodilla por guardias de seguridad.

En el distrito de Gulu (norte), epicentro de la extinta rebelión y ahora feudo opositor, algunos votantes han denunciado que candidatos de todos los partidos les habían ofrecido sobornos a cambio del voto.