Diferentes organizaciones de carácter medioambiental de Lanzarote se suman a las manifestaciones del próximo sábado 20 de abril bajo el lema “Canarias tiene un límite”, en el marco de una “imprescindible reivindicación” que simultáneamente se celebrará en las islas de Tenerife, Gran Canaria, Fuerteventura, La Palma, El Hierro, La Gomera, Lanzarote, y La Graciosa.
En un comunicado, los colectivos ecologistas de Lanzarote aseguran que conocen “con precisión los cronificados impactos ambientales, sociales y económicos en la isla derivados de una industria turística sobredimensionada, descontrolada e insostenible desde toda perspectiva racional en términos de garantizar el interés general y el futuro digno de la población y de la protección del limitado y vulnerable territorio insular”.
Las organizaciones señalan que este modelo turístico, genera beneficios “multimillonarios” para los sectores empresariales minoritarios, pero “condena a la mayoría de la población a la precariedad y a la desigualdad social en condiciones indignas de salarios, vivienda, agua y otros derechos básicos y esenciales”.
Indican que toda la masificación del territorio insular, está derivada de una industria turística “sin control efectivo y razonado, genera impactos permanentes -directos e indirectos- en la biodiversidad marina, aérea y terrestre, en la conservación de su patrimonio cultural, en el mantenimiento de un sector primario esencial y muy castigado por las políticas de mercado, y en la caótica y ruinosa gestión del ciclo del agua en un escenario de sequía cada vez más grave, con pérdidas de este recurso vital superiores al 50% del agua desalada”.
Los colectivos medioambientales se suman a esta manifestación para rechazar, señalan, el modelo de tratamiento de residuos sólidos urbanos y de vertidos de aguas fecales e industriales al mar, la contaminación atmosférica derivada de la quema de combustibles fósiles en la generación de la energía y del agua, las extracciones mineras en espacios generadores de paisaje y sustentadores de una agricultura de secano que “a pesar de su abandono”, apuntan, “sigue constituyendo un recurso”. Por otro lado, culpan de la destrucción del litoral a la ocupación hotelera y otras infraestructuras turísticas, “y las afecciones que provocan la degradación constante de los paisajes de una isla que ostenta el galardón de Reserva de la Biosfera”.
Desde los colectivos denuncian que “fomentar la construcción de más hoteles, más carreteras, más coches, más tendidos eléctricos, más rotondas, más desdoblamientos, más ampliaciones de puertos industriales destruyendo fondos marinos, y cubrir de piche la isla en nombre del progreso, entre otras variables, solo contribuye a mantener un modelo depredador, injusto y contraproducente para la isla, antagónico al que desde hace 40 años y en la actualidad se reclama para exigir sentido común, dignidad humana y justicia social (sanidad, salarios, educación, vivienda, empleo juvenil, entre otros.), por parte de la primera economía del archipiélago canario bajo la responsabilidad de quienes gobiernan”.
Las organizaciones firmantes de este comunicado, bajo el lema, “Lanzarote se agota, Lanzarote tiene un límite”, dejan claro que no están en contra del turismo como sector económico, pero reclaman a los organismos de gobernanza un “cambio radical e inmediato del actual modelo por atentar contra los derechos de la mayoría social y de la conservación efectiva de una naturaleza única y muy vulnerable, patrimonio de las generaciones presentes y futuras de Lanzarote”.
Los colectivos que se suman a la protesta son: Asociación para el Desarrollo de Acciones Climáticas Integrales (ADACIS), Asociación Viento del Noreste (Desert Watch) , Ecologistas en Acción Lanzarote, PANTHALASSA Difusión e Investigación del Medio Marino , Papacría, SEO/BirdLife, WWF.