La cara norte del cono de la erupción del volcán de Cumbre Vieja de La Palma se ha derrumbado durante la madrugada de este sábado, tal y como lo adelantó Itahiza Domínguez, del Instituto Geográfico Nacional (IGN). Este derrumbe parcial ha originado la emisión de nuevas coladas en varias direcciones, que discurren por zonas ya evacuadas y dentro del área de exclusión y que son constantemente monitorizadas y vigiladas.
Esta nueva demolición del cono ha conducido a que una serie de bloques se hayan incorporado a la colada principal y también a que haya nuevas coladas que han vuelto a discurrir, sobre todo, en la zona norte del cono. Así lo ha explicado este sábado en rueda de prensa el director técnico del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), Miguel Ángel Morcuende, quien ha destacado que una de ellas, la que está más situada al noroeste y que va a discurrir hacia la calle Paraíso, en el municipio de El Paso, ha perdido “totalmente la fuerza”, por lo que no resulta ninguna amenaza. “No hay un peligro para vidas ni para haciendas”, ha asegurado.
Otra de las coladas ha surgido inmediatamente al sur de esta, que también ha perdido muchísima intensidad a lo largo de la mañana del sábado, como ha explicado Morcuende. Sin embargo, ha reconocido que hay una tercera colada más al sur “que se esta pegando a la colada principal y ahora es la que más nos preocupa”. Se trata de la lengua de lava que se encuentra a la altura del punto limpio del polígono industrial del Callejón de la Gata, en Los Llanos de Aridane. “Es una masa de lava importante que está en una zona donde hay una importante hondonada”.
El director técnico del Pevolca ha explicado que “en las próximas horas, esa colada va a intentar rellenar ese hueco, que probablemente va a tardar al menos entre 24 a 36 horas en hacerlo”. Cuando lo haga, los expertos estudiarían “cuál sería la salida definitiva hacia al mar de esa colada”.
En cuanto al dedo sur de la colada, Morcuende ha afirmado no ha llegado todavía al mar y se encuentra parado, “pero esta creciendo en espesor, por lo que en cualquier momento cogerá la inercia posible que la empujará al mar”.