Dos familias que han perdido su casa en la erupción de La Palma han rechazado las viviendas que les habían ofrecido las administraciones en el municipio de Fuencaliente por considerar que se encuentran demasiado lejos de su lugar previo de residencia, en el Valle de Aridane.
Lo ha confirmado este lunes el presidente del Cabildo de La Palma, Mariano Hernández Zapata, que se ha mostrado seguro de que esas dos casas serán entregadas a otras familias a la mayor brevedad. No obstante, también ha incidido en la conveniencia de mantener el arraigo de los afectados en la misma zona donde vivían o en su entorno, si lo anterior resultase imposible.
“Ya se lo hicimos saber al Gobierno de Canarias que la reposición de viviendas debía ser dentro del propio Valle de Aridane para no favorecer el desarraigo”, ha señalado el presidente del Cabildo.
Hasta la fecha, las administraciones han entregado 15 viviendas a familias que han perdido la suya en la erupción (12 en Tazacorte y tres en Fuencaliente, a las que se sumarían las dos rechazadas) y confían en facilitar de inmediato otras 46 en Tazacorte.
El volcán de Cumbre Vieja ha arrasado 1.628 edificaciones, según datos del Catastro, de las que 1.304 eran de uso residencial, siendo Los Llanos de Aridane el municipio con mayor número de familias afectadas.
Las conexiones por carretera entre el Valle de Aridane y el municipio de Fuencaliente han quedado en este momento impracticables, porque la lava ha sepultado 72 kilómetros de carreteras en esa zona. Ello obliga, para ir de un punto al otro, a dar un rodeo por la zona oriental de la isla que convierte un trayecto que antes era de 30 minutos en un viaje de hora y media.