Símbolo de Fuencaliente
de su paisaje es vigía,
para el navegante guía
como faro permanente.
Su silueta es referente
de pinturas y grabados,
de datos equivocados
que confunden la memoria
y quedan para la historia
como registros errados.
Jócamo, 25.VIII.2024
NOTA: En Canarias son incontables las montañas o conos volcánicos que con su presencia singularizan el paisaje. En la isla de La Palma, pocos como el “Volcán de San Antonio” identifican con su silueta la imagen inequívoca de todo el municipio de Fuencaliente, sobrado de episodios volcánicos históricos y prehistóricos.
El origen del estético cono de San Antonio se ha confundido erróneamente con la erupción histórica de 1677. Como señala el volcanólogo J.C. Carracedo en el prólogo del libro del prolífico Juan Carlos Díaz Lorenzo (cronista oficial del municipio), es difícil comprender semejante confusión, pero así ha sido hasta fechas recientes (ca. 2000) en la que se denunció el error con datos radiométricos, arqueológicos y hasta con un ilustrativo grafiado de Torriani del año 1586.
La erupción de 1677, para la que se propuso el nombre de volcán de Fuencaliente: “sólo produjo un pequeño cono de picón en la parte norte del San Antonio (hoy muy destruido y ocupado por el aparcamiento) y hornitos en su base sur, de los que salieron grandes volúmenes de lavas que acabaron enterrando la Fuente Santa y generando una extensa plataforma costera” (Carracedo l.c.), hoy parcialmente ocupada por cultivos de plataneras.
Resulta sorprendente que en la moderna cartelería publicitaria municipal se persevere en el error de asignar al Volcán de San Antonio la fecha histórica de 1677, cuando es sabido que supera los 3.000 años de antigüedad. La divulgación nunca debe comprometer la verdad.