El Comité Director del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca) estudia adelantar al próximo viernes realojos de nuevos núcleos poblaciones evacuados por la erupción. Esta posibilidad se ha planteado tras los primeros resultados del análisis del estado de las coladas realizado por los científicos del Instituto Geológico y Minero (IGMA-CSIC) y el Cabildo de La Palma, que permitirán avanzar en una mejor definición de la zona de exclusión, informa la Consejería de Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad del Gobierno de Canarias en un comunicado.
La reunión de este martes del citado comité estuvo presidida y dirigida por el consejero responsable del Pevolca, Julio Pérez, y durante la misma se expusieron los datos obtenidos en la monitorización de las coladas de la zona norte que se llevan a cabo desde el 31 de diciembre para conocer la estabilidad, emisión de gases y temperatura de la lava y así poder ajustar los perímetros de las zonas evacuadas. Con la información aportada, la Dirección Técnica y el Puesto de Mando Avanzado establecerán en cada caso las distancias de seguridad desde los bordes de las coladas y señalizarán los accesos en función del riesgo con cartelería informativa. En los próximos días se llevará a cabo el mismo estudio en el lado sur de la erupción, donde persisten los mayores problemas debido a la emisión de gases, principalmente en La Bombilla, El Remo y Puerto Naos.
Además, los representantes de todas las administraciones y equipos de emergencia presentes en el Comité de Dirección resaltaron la colaboración y la prudencia que ha demostrado la población en el regreso a sus casas en la primera fase del realojo, que se inició ayer lunes para determinados núcleos poblacionales de El Paso, Tazacorte, Los Llanos y Fuencaliente y que son, por el norte, parcialmente Tacande y Tajuya (rotonda del Sombrero), Las Martelas, La Condesa, Marina Alta, Marina Baja y Las Cabezadas (zona de campo de fútbol y cementerio); y por la zona sur, el núcleo de El Charco.
El retorno se está llevando a cabo sin incidencias y de forma gradual, siguiendo en todo momento las indicaciones de las autoridades de no bajar a sótanos, ventilar bien las viviendas e ir siempre acompañados.
En este sentido, se recordó que durante los días 5 y 6 de enero, con motivo del Día de Reyes, se suspenderán los acompañamientos a regantes, agricultores y vecinos y vecinas.
Sobre el número de albergados en hoteles, la cifra se reduce en 16 personas respecto al último dato disponible, permaneciendo hospedadas un total de 548 personas. De ellas, 356 se alojan en Fuencaliente, 122 en Breña Baja y 70 en Los Llanos de Aridane. Cruz Roja estima que en las próximas fechas varias decenas de personas regresarán a sus hogares. Así mismo, sobre las personas dependientes, que fueron desalojadas antes de la erupción, 43 continúan en centros sociosanitarios de la isla y regresarán a sus hogares una vez lo hagan sus familiares y sus viviendas vuelvan a contar con las condiciones habitacionales adecuadas para estas personas.
En la reunión se analizó también el último informe de Comité Científico, que recuerda que en esta fase post-eruptiva persisten algunos peligros volcánicos y no conlleva necesariamente el final de la reactivación magmática en Cumbre Vieja, aunque se mantiene la ausencia de tremor, la sismicidad sigue siendo de baja magnitud en todas las profundidades y que no hay tendencia en las deformaciones.
Los niveles de calidad del aire son buenos desde el 28 de diciembre, tanto en dióxido de azufre como en partículas PM10 en todas las estaciones, con una única superación del valor límite diario el día 31 en Los Llanos de Aridane.
El Comité Científico expuso también que los volúmenes estimados de materiales volcánicos emitidos para formar el edifico volcánico es de 28 millones de metros cúbicos (m3) y para el campo de lavas subaéreas es de unos 187 millones de m3. A estos volúmenes hay que sumarles los del material piroclástico de caída y el volumen de las lavas submarinas.