El acto oficial del XIII aniversario de la declaración de La Palma como Reserva Mundial de la Biosfera por parte de la UNESCO se ha celebrado este viernes en la Plaza de España de Santa Cruz de La Palma con las intervenciones del presidente del Cabildo, Anselmo Pestana, y del gerente del Consorcio Reserva Mundial de la Biosfera de La Palma, Antonio San Blas.
Pestana, en su discurso institucional, ha recordado que “han pasado ya trece años de la declaración de todo el territorio de la isla de La Palma como Reserva Mundial de la Biosfera por parte de la UNESCO; trece años en el que el esfuerzo del pueblo palmero en el camino hacia un territorio más sostenible ha ido dejando muestras progresivas del compromiso insular con la compatibilización entre desarrollo socioeconómico y conservación cultural y de la biodiversidad”.
La velocidad del proceso evolutivo de la humanidad, aseguró, “afecta de modo determinante a todo lo que nos rodea. La huella ecoambiental, impactante y en la mayoría de casos permanente, que ha golpeado de manera inexorable a otros territorios tiene su contrapartida en estos espacios denominados Reservas de la Biosfera donde se ha ejemplarizado extraordinariamente la simbiosis personas-naturaleza”.
Fruto de este proceso evolutivo, dijo, es “el movimiento globalizador actual que tiene como una de sus características un aspecto homogeneizador que parece anular las identidades y culturas locales y, frente a esto, hemos de luchar por la prevalencia de nuestra identidad y cultura ya que son básicas para la construcción colectiva de la sociedad del conocimiento, pues éste no es de una élite sino que se trata de un proceso en el que participa la ciudadanía sin exclusiones. El hecho cultural y el elemento identitario en la isla de La Palma aportan diferenciación y cohesión social mediante la creatividad e innovación con el fin de transformar el conocimiento en valor social y económico, frente a las frías modas de la globalización”.
Identidad, cultura y tradición, afirmó el presidente, “se entremezclan en la conservación y el desarrollo del territorio, incluyendo tanto sus componentes tangibles como intangibles, y precisan de nuevas fórmulas de gestión y entre ellas emerge la denominada custodia del territorio. Hablamos de fomentar un conjunto de estrategias y técnicas que pretenden favorecer y hacer posible la responsabilidad de los propietarios y los usuarios del territorio en la conservación de los valores naturales, culturales y paisajísticos y en el uso adecuado de sus recursos”. Se trata pues, subrayó, “de una filosofía de conservación, no sólo de la naturaleza sino también del paisaje y el patrimonio asociado, que se concreta mediante la aplicación de diversos mecanismos de intervención y la voluntad colaborativa entre propietarios y entidades públicas o privadas de custodia que finalmente se corresponsabilizan de la protección de los valores del mismo que nos identifican como pueblo”.
De este modo, añadió, “la custodia es una fórmula eficaz de gestión y conservación del territorio que en La Palma debe tener materialización, entre otras, por medio de acciones encaminadas a la recuperación de parcelas, hoy en desuso, o a la regeneración de aquellas en deterioro y que impactan sobre la calidad ambiental y paisajística del entorno, generando no sólo la recuperación paisajística sino la revitalización económica de las zonas”.
Pestana admitió que “el camino es largo, pero también sabemos que nuestro compromiso es firme y sincero, por eso me permito pedir un esfuerzo para que sigas colaborando siendo actor principal en la decidida apuesta por una vía de desarrollo basada en los principios de la sostenibilidad que conlleva un compromiso social e institucional a largo plazo, compromiso en el que tenemos que estar implicados todos para conseguir que la Isla siga conservando su particular idiosincrasia, su identidad y a su vez avance en el desarrollo socioeconómico de sus gentes con una visión integrada y donde las líneas y estrategias promovidas por la Reserva Mundial de la Biosfera La Palma sean nuestro faro guía. Al pueblo palmero y a ti como principal valor y nexo de cohesión felicidades por mantener y contribuir a desarrollar la filosofía de la UNESCO para las Reservas de la Biosfera en la isla de La Palma. Feliz decimotercer aniversario”.
Los cuatro nuevos Embajadores de Buena Voluntad de la Reserva Mundial de la Biosfera de La Palma, nombrados este viernes en el XIII aniversario de la declaración de la Isla como espacio modélico de la Unesco, son: la joven diseñadora palmera Paloma González Suárez; el director del Instituto de Astrofísica de Canarias, Rafael Rebolo; Albert Cortina Ramos, especialista en urbanismo, ordenación del territorio, medio ambiente y gestión del paisaje, y Antonio Domingos de Sousa Abreu, biólogo experto en medioambiente.