La llegada de inmigrantes a Canarias no ha provocado un repunte de la criminalidad, según los datos ofrecidos este jueves por la Delegación del Gobierno en Canarias. Las infracciones penales en las Islas cayeron en un 6% durante el último cuatrimestre de 2020. El delegado, Anselmo Pestana, ha apuntado que en los dos meses de mayor presión migratoria del año pasado, octubre y noviembre, la criminalidad cayó en un 1% y un 3% respectivamente. En diciembre, el descenso fue de un 18,8%. En la provincia de Las Palmas, la reducción de las infracciones penales ha sido de un 7,9% y en Santa Cruz de Tenerife de un 16,8%.
Según un desglose elaborado por la Policía Nacional, las infracciones cometidas por personas llegadas en pateras y cayucos a Canarias son 122. De esta cifra, 60 son delitos de falsedad documental. El resto (45) “tienen relevancia en relación a la seguridad”, según Pestana. Muchos de ellos son agresiones entre los propios inmigrantes, robos y hurtos. ''Todos esos hechos han sido esclarecidos y las personas responsables han sido detenidas'', afirma la Delegación en una rueda de prensa ofrecida para desmontar el vínculo entre criminalidad e inmigración. Una relación ''interesada''. ''Ya veremos por qué hay este interés y quienes lo fomentan. No todo vale en democracia para intentar criticar al Gobierno'', insistió el delegado del Gobierno.
Pestana ha indicado que los datos han sido monitorizados hasta el 20 de enero y, aunque reconoce que se ha producido algún refuerzo “puntual” de agentes de Policía, considera que Canarias cuenta con “medios suficientes para garantizar un clima de seguridad”. En cualquier caso, añade que la situación está siendo monitorizada para, de ser necesario, reclamar más efectivos. En concreto, el delegado del Gobierno ha destacado que “en el sur ha habido refuerzos de la Guardia Civil y se está monitorizando y creo que ha bajado muchísimo la presión”. Además, recuerda que durante el año pasado “se está ganando en numero de efectivos y se va a seguir creciendo en este año”; si bien es consciente de que “no se está reforzando al ritmo que quieren muchos”, dice que es algo que “ocurre con todos los servicios públicos”.
La Delegación del Gobierno ha pedido también precaución y prudencia porque “la gente llama a la Policía porque simplemente ve a extranjeros paseando como si eso fuera un delito o un riesgo y eso no es una incidencia de seguridad” o ante los bulos que se divulgan a través de las redes sociales e incluso de algunos medios de comunicación y también ante denuncias falsas contra extranjeros. “Hemos visto vídeos compartidos que corresponden a Italia. Vídeos fuera de tiempo, que corresponden a hace dos años y que no se corresponden con la realidad que estamos viviendo en Canarias”. Algunas de estas imágenes han sido divulgadas por partidos como Vox: “La oposición no está para compartir falsedades”, subrayó Pestana durante una rueda de prensa en la que también han estado presentes el general jefe de la Guardia Civil en Canarias, Juan Miguel Arribas, y el jefe superior de la Policía de Canarias, Rafael Martínez.
''No cabe neutralidad contra la xenofobia“, apuntó con contundencia Pestana. ''En situaciones como esta, de crisis moral, cuando algunos se empeñan en degradar nuestros valores, no vale la neutralidad en quienes practican la incitación al odio, hacia el distinto, hacia el que viene de fuera, al pobre. No son los valores de nuestra tierra ni los constitucionales”.
Asimismo, Pestana ha apuntado que se han impuesto unas 20 denuncias relacionadas con las manifestaciones en contra de la inmigración que han tenido lugar en las últimas semanas. En algunas de ellas se vulneró el toque de queda y se incumplieron las medidas sanitarias implantadas para evitar la propagación de la COVID-19. Pestana insistió en que se persiguen los delitos de odio, pero estas sanciones están relacionadas con la salud pública y la realización de protestas sin permiso de la Delegación. Además, también ha indicado que prácticamente ningún inmigrante ha interpuesto denuncia por agresiones, “dos o tres”, ha afirmado el el jefe superior de la Policía de Canarias. En este punto, Pestana ha animado a cualquier persona que sufra un ataque, independientemente de su nacionalidad, a denunciar agresiones.
La “cárcel” de Canarias
El delegado del Gobierno en Canarias ha intentado desmentir también que las Islas se hayan convertido en una cárcel de migrantes. Según Anselmo Pestana, de las 27.000 personas que han llegado por vía marítima desde los últimos meses de 2019, se han ido 16.500. ''En las Islas hay más de 2.000 menores extranjeros no acompañados y unos 9.000 adultos en distintas instalaciones del Gobierno de España''. Los últimos datos del Ministerio de Migraciones evidenciaron que a fecha de 11 de diciembre habían sido derivadas 2.035 personas. La Secretaría de Estado de Migraciones explicó que durante la vigencia del estado de alarma no se realizó ningún traslado y el 70% del total de las derivaciones se produjeron en septiembre, octubre y noviembre.
Además, el Ministerio del Interior reforzó la presencia policial en los aeropuertos de Canarias para evitar las salidas por sus propios medios hacia otras Comunidades Autónomas de personas migrantes. Varios migrantes manifestaron que, pese a tener su documentación en vigor, fueron interceptados en el aeropuerto por agentes de la Policía Nacional. En algunos casos son puestos en libertad, en otros, son trasladados a centros de internamiento de extranjeros. El delegado del Gobierno en Canarias ha reconocido que estos controles están relacionados con la intención de deportar a los migrantes que llegan. '“Lo primero que se hace es identificarlos y se les notifica una orden de expulsión, que puede ser ejercida en cualquier momento, en un aeropuerto, una calle en un centro comercial''. Para poder trasladarse, Pestana indica que ”no se les exige el visado“, tan solo ”el pasaporte“ y ”la residencia tendrá que justificarla“.
Sobre las derivaciones hacia Tenerife, Pestana no ha querido desvelar la fecha en la que se vaya a producir la apertura en Las Raíces, con capacidad de 2.000 personas y se ha limitado a decir que “es inminente” y que “se está produciendo la desescalada de los recursos alojativos de Gran Canaria”. Preguntado por datos de deportaciones, el delegado del Gobierno ha remitido al Ministerio correspondiente, al tiempo que ha recordado que se está estrechando la colaboración con Mauritania y Senegal. “Y con Marruecos hay cuatro vuelos semanales con 20 personas cada uno y se está intentando negociar un incremento para proceder a las devoluciones”, ha añadido.
Preferentemente, serán expulsadas aquellas personas que hayan protagonizado incidentes. “Si tienen mal comportamiento, como tienen una orden de expulsión, podemos ejecutarla en cualquier momento”. En este sentido, recuerda en los recursos alojativos del sur de Gran Canaria hay migrantes que han sido expulsados “or ciertas actitudes irresponsables que afectan a la convivencia”. Estas personas se encuentran en situación de calle y asegura que deben “hacer un seguimiento para que esas personas no se queden en el exterior sin techo y sean otro foco de problemática en el ámbito local”.