Canarias ha recibido en octubre 14.976 migrantes en sus costas, lo que marca un récord histórico en la llegada de personas en pateras al archipiélago, ya que ni en la llamada crisis de los cayucos en 2006 se habían producido tantas llegadas en un solo mes, según los últimos datos publicados este jueves por el Ministerio del Interior.
En el acumulado del año, desde el 1 de enero hasta el 31 de octubre, han arribado 30.705 personas al archipiélago, hasta ahora la segunda cifra más alta de llegadas a las islas tras el máximo histórico registrado en 2006, cuando arribaron 31.678 personas en todo el año, aunque todo apunta a que este dato va a superarse en breve a tenor del ritmo de las entradas.
Los 14.976 migrantes que han llegado solo en octubre suponen el 49% de todos los que han llegado en el año, a un ritmo de 483 personas diarias.
Estas cifras de llegadas al archipiélago hasta el 31 de octubre suponen un incremento del 111,2% respecto al mismo período del año pasado, cuando arribaron 14.541 personas en 325 pateras.
Desde la crisis de los cayucos, las quincenas más intensas de llegadas a las islas canarias se registraron en el otoño de 2020, aunque con cifras bastante inferiores a las registradas este mes de octubre (la primera con 8.561 personas y la segunda con 7.168).
Durante 2022 y el primer semestre de 2023 la ruta canaria parecía dar signos de estabilización, incluso de descenso: el año pasado se cerró con 15.682 llegadas, un 30% menos que en 2021 (22.316), y a 31 de mayo el flujo de inmigrantes hacia las islas se había reducido otro 47% (de 8.268 a 4.406), según los balances quincenales que publica el Ministerio del Interior.
Sin embargo, en los meses de verano esa tendencia se rompió y ha ido en aumento desde entonces, marcando ahora en octubre el récord de llegadas en un solo mes.
Aunque en mucha menor proporción, han aumentado también las llegadas a la península y Baleares por mar, que han crecido un 9,4% respecto al año pasado (de 11.326 a 12.392).
En el cómputo total de las llegadas de extranjeros a España tanto por mar como por tierra el aumento es del 57,5% en comparación con el mismo período del año anterior: en los diez primeros meses del año han entrado 44.404 personas frente a las 28.196 del mismo periodo del año anterior.
Las que han disminuido han sido las entradas por vía marítima a Ceuta y Melilla: se reducen a la mitad en el caso de la primera (60 migrantes frente a los 118 de 2022) y en el caso de Melilla bajan un 7,6% (de 144 a 133).
El número de inmigrantes llegados de forma irregular a Ceuta y Melilla saltando la valla fronteriza ha bajado un 46,1%, especialmente por el freno en Melilla, donde el año pasado hubo varios saltos masivos.
En esa ciudad autónoma se ha registrado la entrada de 145 extranjeros hasta el 31 de octubre, frente a los 1.160 del año pasado (87,5% menos). En Ceuta ha crecido un 6,8 , al pasar de 907 a 969.
Causas del aumento de llegadas
Las causas de estas llegadas, tal y como explicó el ministro de Migraciones, José Luis Escrivá, en la reunión que mantuvo este martes con las comunidades autónomas para explicar el reparto de migrantes por el país, son fundamentalmente dos: la mayor inestabilidad social y política en Senegal y un periodo prolongado de buen estado del mar. Además, el incremento de llegadas de las últimas semanas tiene algunas características diferentes a otras etapas, como son el aumento de menores no acompañados (4.700 desde agosto), la concentración de llegadas a El Hierro (un tercio de las llegadas desde agosto) y la mayor proporción de subsaharianos (un 70% del total).
Escrivá explicó a los presentes que la gestión de este incremento de llegadas se ha abordado con “solidaridad con las zonas más afectadas, especialmente Canarias” y con una gestión integral del sistema de acogida. Además, aseguró que el “trabajo con las entidades del sistema ha sido continuo, como también lo ha sido la búsqueda de localizaciones óptimas, como son los espacios militares en desuso”.
Mientras tanto, y, “de forma transitoria”, según explicó el ministro en funciones, se están utilizando otros recursos, como hoteles o albergues, como se ha hecho en ocasiones anteriores“.