MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El ex presidente del Gobierno José María Aznar, el líder del PP, Mariano Rajoy, y los ex ministros Ángel Acebes y Jaime Mayor Oreja coincidieron este lunes en reivindicar la política antiterrorista que se aplicó durante los ocho años de gobierno del PP pero también en su exigencia al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero para que no permita a ETA presentarse a las elecciones municipales del próximo año y volver a las instituciones.
El primero en hacerlo fue Aznar, que alertó contra “el juego temerario” del Gobierno en este momento, cuando la posición actual de Batasuna es “un plato recalentado de la cocina de ETA”. Después le siguieron Acebes y Mayor Oreja, que denunciaron que se intente distinguir a Batasuna de ETA como “paso previo a su participación en las elecciones”. Y finalmente Rajoy, que avisó de que “ni ETA ni sus franquicias se pueden presentar nunca a ninguna elección democrática” porque “ETA es un todo”.
El ex presidente del Gobierno José María Aznar reunió en este acto a sus tres ministros del Interior entre 1996 y 2004, Jaime Mayor Oreja, Mariano Rajoy y Ángel Acebes, con motivo de la presentación del libro 'España, camino de libertad' (Editorial Gota a Gota), que han escrito el diputado y portavoz de la Comisión de Interior del PP, Ignacio Cosidó, y el analista y editor del Grupo de Estudios Estratégicos (GEES), en el que resumen los pilares de la política antiterrorista de los gobiernos del PP.
Al acto asistieron el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti; la alcaldesa de Lizarza, Regina Otaola, la parlamentaria del PP y presidenta de la Fundación Miguel Ángel Blanco, Mari Mar Blanco; y representantes de las víctimas del terrorismo como Ángeles Pedraza (AVT), Daniel Portero (Dignidad y Justicia) y Francisco José Alcaraz (Voces contra el Terrorismo). La ex presidenta del PP vasco María San Gil también estaba invitada al acto pero finalmente no pudo asistir, informaron fuentes de FAES.
También estaban presentes la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid y esposa de Aznar, Ana Botella; los ex ministros José María Michavila y José Manuel Romay Beccaria; numerosos parlamentarios como Federico Trillo, Ana Pastor, Vicente Martínez-Pujalte, Cayetana Álvarez de Toledo, José Antonio Bermúdez de Castro o Juan José Lucas.
AZNAR AVISA DE LOS “JUEGOS TEMERARIOS” DEL GOBIERNO
El ex presidente del Gobierno José María Aznar reivindicó durante el acto la política antiterrorista que se aplicó durante sus ocho años de mandato y alertó contra el “juego temerario” del Gobierno socialista porque, según dijo, la posición actual de Batasuna es “un plato recalentado de la cocina de ETA”.
Además, recalcó que hace poco menos de un año el Tribunal Europeo de Derechos Humanos “zanjó controversias que todavía se quieren mantener vivas” y “avaló sin sombra alguna la Ley de Partidos y la ilegalización de las sucesivas marcas electorales de ETA”, algo que, a su juicio, hay que recordar “cuando se repiten las mismas conjeturas tantas veces fallidas”.
Después le tocó el turno a Ángel Acebes, que lamentó que “todavía” haya personas que “desafiando la experiencia, la ética y la razón” opinen que con la ley “no basta” y que “los atajos en forma de negociaciones y contrapartidas son inevitables y necesarios para acabar con el terrorismo”. A su juicio, son los mismos que insisten en que “no hay una ETA sino dos”, esto es, una “mala de los halcones muy terroristas y una ETA buena de palomas un poco menos terroristas”, ignorando la sentencia del Tribunal Supremo y del Tribunal de Estrasburgo.
En este sentido, denunció que en este momento algunos vuelvan con “la cantinela” de que ETA y Batasuna “no son lo mismo” y avisó que reconocer a Batasuna “una naturaleza y vocación distintas” de la de la banda terrorista sería “el mayor balón de oxígeno que podría recibir en estos momentos de debilidad”. Acebes recalcó que “Batasuna no puede hacer política” y cualquier “gesto, polo o pista de aterrizaje” que suponga facilitarle esa posibilidad “debe ser rechazado de manera clara, abierta y frontal”.
MAYOR: “CERTEZA” DE QUE HAY UNA “SEGUNDA PARTE”
Más tarde subió a la tribuna Mayor Oreja, que fue un poco más allá al afirmar que tiene la “certeza moral” de que se vive “simplemente la segunda parte de un proyecto” de negociación con la organización terrorista, que sigue “un guión definido como de resolución de conflictos, al estilo del que tuvo lugar en Irlanda del Norte”.
El eurodiputado del PP denunció que ahora se estén “inventado” que ETA y la izquierda abertzale son dos “personalidades diferentes”. A su juicio, “ese alejamiento o distancia” entre ambos es una “falsedad”, “una mentira” y “pura ficción” que “forma parte del guión de ETA”. “Los españoles no nos merecemos un camino de falsedad para que ETA aterrice en el País Vasco. ETA merece sobre todo la derrota y la sociedad española y las víctimas merecen la verdad”, dijo, para añadir que la dirección de su partido “acierta” cuando dice que la prueba serán las municipales.
El acto lo cerró Mariano Rajoy, que avisó al Gobierno que “ni ETA ni sus franquicias se pueden presentar” a las elecciones municipales del próximo año, una cita que, a su juicio, será el “el test definitivo” para saber cuál es “la voluntad” del Ejecutivo socialista. “Espero no verme obligado a decirle a ningún presidente lo que le dije en la última legislatura, yo garantizo que a mi nadie me lo podrá decir nunca”, recalcó.
Con esta frase, Rajoy se refería al duro 'cara a cara' que mantuvo en mayo de 2005 con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con motivo del Debate sobre el estado de la Nación, en el que le acusó de “traicionar a los muertos” al permitir que ETA volviera al Parlamento vasco.
COSIDÓ: “AZNAR JAMÁS NEGOCIÓ CON ETA”
El líder de la oposición defendió los “pilares” en los que se asentó la política antiterrorista de Aznar: el primero, “con los terroristas ni se dialoga ni se negocia”, y éste acompañado del trabajo de las Fuerzas de Seguridad, la cooperación internacional y el papel de las víctimas del terrorismo. “Son los pilares del pasado, pero son los pilares y principios del futuro y, desde luego, los que inspirarán mi política antiterrorista si el pueblo español así lo desea”, resaltó.
Previamente, tomó la palabra Ignacio Cosidó, que afirmó que los gobiernos de Aznar llevaron a cabo una “política contra el terror acertada y de una gran altura moral”, de la que “todos los españoles” se pueden sentir hoy “legítimamente orgullosos”. “El Gobierno presidido por Aznar jamás negoció con ETA ni cedió al chantaje del terrorismo. En ningún momento se salió de la línea estricta que marca la ley. No hubo 'loyolas', ni 'De juanas' ni 'faisanes'”, exclamó, cosechando un aplauso del auditorio.