Rosa Díez pide la devolución de los PGE porque son propios de un “conductor suicida”

MADRID, 15 (EUROPA PRESS)

La diputada de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, registró hoy en el Congreso su enmienda a la totalidad a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2010 por considerar que se trata de unas cuentas propias de un “conductor suicida” y que conducen hacia un “Estado residual”.

En una rueda de prensa en la Cámara Baja, Díez justificó su decisión de pedir, como ya hiciera el año pasado, la devolución del proyecto de Presupuestos al Gobierno en que se basan en unas previsiones macroeconómicas “sencillamente increíbles” que el Ejecutivo ha “falseado” a sabiendas.

La líder de UPyD subrayó que su texto es una “enmienda de totalidad a toda la política económica” del Gabinete Zapatero, una estrategia que carece de apoyos tanto dentro como fuera de España y que ha recibido críticas, por ejemplo, del gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, de la propia Comisión Europea o de la OCDE.

“NOS QUEMAMOS A NOSOTROS MISMOS”

“El Gobierno es como el conductor suicida que va en dirección contraria y que cree que son los demás los que están equivocados”, censuró Díez, quien advirtió de que como el Ejecutivo “niega la realidad” de la situación económica, es incapaz de luchar contra la crisis.

Pero para Díez, “lo peor” del proyecto del Gobierno es que se trata de las cuentas públicas de un “Estado residual” en el que el Ejecutivo cada vez tiene menos instrumentos para intervenir en política económica. “Y los pocos que tiene --lamentó-- los va soltando como acaba de hacer con el acuerdo de financiación autonómica”.

“Estamos en un proceso autodestructivo del Estado. Vamos hacia un país insostenible en términos económicos, de cohesión social, de competitividad y de igualdad entre todos los españoles. Nos estamos quemando a nosotros mismos”, apostilló.

“REPARTIR LOS RESTOS DEL NAUFRAGIO”

Tras esta censura política, Díez pasó a las críticas económicas. Así, incidió en que el Gobierno ha hecho unos Presupuestos “para repartir los restos del naufragio”, que los ha basado en cifras “falsas” y que con ellos ha contradicho las declaraciones de distintos miembros del Gobierno.

A modo de ejemplo, comentó que cuando el jefe del Ejecutivo dice que hay que avanzar hacia la “sociedad del conocimiento” lo que en realidad quiere decir, según las cuentas públicas, es que hay que reducir la inversión en I+D+I. “Zapatero ha puesto dinero al servicio del Parlamento Europeo para hacer traducciones al gallego, pero aquí necesitamos un traductor para traducirle a él”, ironizó.

También se quejó de que se vayan a aumentar los “gastos superfluos”, de que, con la subida del IVA no se suban los impuestos a las rentas altas, sino a toda la población, y de que el déficit y la deuda sean “insostenibles” y pongan en peligro pilares del Estado de Bienestar.

“CEREMONIA DE LA CONFUSIÓN”

Díez mantuvo un contacto hace dos semanas con la vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, para hablar de las cuentas públicas, pero no ha sido incluida en la ronda abierta por el portavoz del Grupo Socialista, José Antonio Alonso. Por eso denunció la “falta de respeto institucional” del dirigente socialista hacia UPyD.

La diputada auguró que la semana que viene, cuando se debatan las enmiendas a la totalidad a los Presupuestos, en el hemiciclo se volverá a vivir otra “ceremonia de la confusión” porque, aunque todos los que suban a la tribuna y no sean socialistas harán críticas feroces al proyecto, al final el texto pasará su primer trámite parlamentario.

También expresó su temor a que la cuentas públicas que finalmente aprueben las Cortes sean “peores” que las inicialmente propuestas por el Gobierno tras su paso por el “mercado persa” que, según dijo, ha abierto el PSOE, para buscar el apoyo de otros grupos.