El Ayuntamiento de Agaete ha quedado abocado a un gobierno en minoría después de que el alcalde del municipio, Juan Ramón Martín Trujillo, haya firmado el cese del concejal de Cultura, Juventud, Sector Primario y Desarrollo Rural, Javier Gil, recientemente expulsado de la formación política Alternativa Ciudadana por Agaete-Nueva Canarias (ALPA-NC).
Gil no se sentará solo en el grupo de los “no adscritos” del Pleno municipal, sino que lo hará acompañado por el primer teniente de alcalde y concejal de Empleo y Desarrollo Local, Carlos Álamo, también de ALPA-NC.
Así lo ha anunciado Álamo la mañana de este lunes frente a las puertas del Consistorio, donde ha manifestado que “no puedo seguir con dignidad y con coherencia en un grupo que no me ha tenido en cuenta y ha tomado una decisión drástica y de forma totalmente injustificada contra un compañero que estaba haciendo su trabajo fenomenal”.
Una vez Álamo y Gil pasen a ocupar el asiento de los no adscritos a grupos políticos, el Ayuntamiento quedará gobernado en minoría, puesto que únicamente contará con los cuatro concejales del Partido Socialista (PSOE) y con la mitad de los cuatro representantes que obtuvo ALPA-NC en los últimos comicios: Inés Miranda – también consejera insular de Política Territorial- y Hortensia Jiménez.
Esto supone un total de seis ediles, siendo siete los necesarios para obtener la mayoría absoluta en Agaete. Gil descarta de momento un acuerdo alternativo con el Partido Popular (PP) con quien podrían formalizar un gobierno, al contar los populares con cinco concejales en la oposición. Sin embargo, añade que “ahora se abre un nuevo panorama que habrá que analizar”.
Álamo asegura que “no queríamos llegar a este punto, pero la obligación y el honor como persona me obliga a tomar este camino”. En ese sentido, explica que aunque pase al grupo de los no adscritos, seguirá siendo miembro y portavoz del partido, porque “creo que quienes tienen que renunciar son otros, porque han hecho las cosas mal y han tomado decisiones sin representatividad”.
Gil tacha su proceso de expulsión del partido como “desahuciador” y asegura desconocer de qué se le acusa, puesto que el expediente disciplinario resuelto por el Consejo Político Nacional de la Coalición Electoral Nueva Canarias – Frente Amplio “se ha llevado a nuestras espaldas”. Sobre el expediente, indica que se alega falta de compromiso e incumplimiento de deberes, sin especificar los mismos.
“Yo lo veo como una persecución personal por parte de un grupo minoritario del partido”, sentencia. Sobre el origen de este malestar, no descarta que se deba a su férrea oposición a la matanza de cabras emprendida por el Cabildo de Gran Canaria, presidido por Nueva Canarias.
Aunque Álamo no habla de persecución, sí que opina que “no se le ha tratado objetivamente”. “Ahora mismo el partido no quiere que estemos en sus filas, a mí me parece que hay irregularidades manifiestas y por ese motivo se han hecho las alegaciones pertinentes”, precisa.
Álamo asegura haber apoyado en todo momento al concejal y no comprende los motivos por los que su opinión no ha sido tenida en cuenta, siendo el portavoz del partido en el Consistorio. “Duele que se tomen decisiones a mis espaldas y a la de otros miembros de la Ejecutiva, por parte de un sector minoritario, que no representa para nada los intereses del partido a nivel general. Es evidente que no puedo continuar en estas circunstancias en un proyecto político del que no me siento parte y han intentado dejarme por debajo”, lamentó.
Asimismo, afirma que durante el tiempo que ha estado al frente de su Concejalía se ha mantenido “fiel al pacto” suscrito entre ALPA-NC y PSOE en el año 2015. Ambos adelantan que apoyarán las medidas que consideren positivas para Agaete.
De no llegar a un acuerdo, sostiene que recurrirá su cese y traslado al grupo de los no adscritos. Además, cree que el alcalde deberá buscar una mayoría alternativa o “presentar su renuncia, tal y como manifestó en su momento”.
El alcalde no teme una moción de censura
El primer edil de Agaete - que en el momento en que habló con Canarias Ahora no tenía constancia de la renuncia de su primer teniente de alcalde - no teme gobernar en minoría “igual que está el señor Clavijo o el señor Rajoy”, ni tampoco una moción de censura encabezada por el PP.
A su juicio, la nueva situación que tiene que afrontar el Consistorio supone un incremento del diálogo y del consenso con la oposición. Asegura que la Ley establece de forma clara la imposibilidad de que se presente una moción de censura en la que tengan participación los concejales que pasan al grupo de los no adscritos.
Juan Ramón Martín Trujillo, lamenta “profundamente” la decisión de Álamo, porque “habíamos llegado a un gran acuerdo de gobernabilidad y de progreso para el municipio”.
Al respecto, hace hincapié en que el PSOE no ha solicitado la dimisión de ningún compañero de Gobierno y sostiene que, una vez expulsado de su partido, no tenía más remedio que cesar a Gil. “Era obligatorio, por respeto a lo que habíamos firmado en el pacto. Respeto absolutamente los criterios de mi socio de Gobierno y lo único que hago es darle resolución a lo que nos llega”, concluye.
Sobre los representantes políticos que suplirán a Gil y Álamo al frente de sus respectivas concejalías, mantiene que tendrá que consensuar este asunto con ALPA-NC.