El Gobierno de Canarias, a través de la Consejería de Política Territorial, Sostenibilidad y Seguridad, anunció este viernes que dispone de tres nuevos helicópteros de búsqueda, rescate y lucha contra incendios forestales que se incorporarán en los próximos días al servicio del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES).
Así, según un comunicado del Gobierno canario, con la llegada de estas aeronaves al Archipiélago a finales de este mes de enero, se cumple el compromiso adquirido por la empresa adjudicataria del servicio.
Los nuevos helicópteros, que sustituirán a los que actualmente se encuentran en las islas de Fuerteventura, El Hierro y La Palma, estarán operativos a lo largo de la próxima semana, y con estas nuevas unidades Canarias contará a partir de ahora con las aeronaves de rescate más modernas de Europa.
Por otra parte, estos helicópteros siguen perteneciendo a la familia del modelo Sokol pero con algunas mejoras respecto a las actuales unidades, ya que son más ligeros, lo que permite más capacidad de carga útil debido a ese menor peso en vacío, por lo que en caso de una operación de rescate dispone de más autonomía y mayor capacidad de personas a bordo.
Además, los paneles de cabina de los pilotos son más pequeños, lo que mejora aún más la visibilidad y la distribución del panel de instrumentos ha sido mejorada para reducir la carga de trabajo de los pilotos, con lo que se incrementa, si cabe, en mayor medida la seguridad en la operación.
Características generales del Sokol
En este sentido, entre las características generales del Sokol, modelo que presta el servicio de rescate actualmente en Canarias, hay que destacar que se trata de helicópteros de tipo medio, que cuentan con dos turbinas de gran potencia, levantan 6.400 kilogramos y pueden llegar a los 140 nudos de velocidad, con una autonomía de cuatro horas de vuelo.
Asimismo, su gran capacidad de carga le permite, entre otras ventajas, seguir volando con las máximas garantías aunque falle uno de los motores, además puede llevar hasta 14 pasajeros y tiene una gran capacidad de lanzamiento de agua en las misiones por incendios forestales: su bambi (recipiente para carga de agua) puede albergar hasta 1.589 litros.
Por ello, los rescatadores han podido comprobar una mayor amplitud y espacio en cabina, lo que facilita las operaciones y manejo de camillas, ubicación de la víctima, material sanitario y herramientas.
Así, el Sokol incrementa la seguridad en las operaciones debido a ese remanente de potencia mayor, ya que se gana en operatividad al poder acceder en igualdad de pesos y pasajeros a mayores altitudes y temperaturas.
Por su parte, el helicóptero posee gran autonomía de trabajo y dispone de un tren de aterrizaje de tres puntos, que permite el aterrizaje en pendientes mayores y en terrenos no preparados con mayor estabilidad del helicóptero, proporcionándole a la tripulación y rescatadores mayor seguridad.
Disponen, además, de amortiguadores que evitan que entren en resonancia al estar en tierra, hecho que ha sucedido en varias ocasiones con helicópteros con tren de aterrizaje de patines.
También es relevante señalar que en el Sokol, la nueva adjudicataria HASA-EURAL ha apostado desde hace años por contar con dos pilotos por cada aeronave, formados con los cursos SAR y capacitados para reaccionar y volar en situaciones habituales y en casos de posible emergencia, “siendo esta una garantía de seguridad que no aporta, de momento, ninguna otra compañía” ante cualquier incidente que pudiera sufrir el comandante de la aeronave.
Finalmente, el Sokol se puede considerar un helicóptero con “mejores” características de potencia, capacidad de carga y maniobrabilidad, permitiendo realizar las operaciones de forma “más segura y con mayores prestaciones”; son máquinas “robustas y fiables” que han demostrado su buen funcionamiento, pasando por temperaturas de menos de 18 grados en Polonia a más de 30 grados en Marruecos hasta llegar a Canarias.