La lista regional que pactaron Coalición Canaria (CC) y el PSOE en 2015 para introducirla en la modificación del Estatuto de Autonomía que se tramita en las Cortes ha sido cuestionada por el experto propuesto por los nacionalistas, el catedrático Francisco Villar, durante su intervención ante la Comisión sobre la reforma electoral que se ha celebrado este lunes en el Parlamento.
Para Villar, “la lista regional tropieza con la realidad de que los elegidos deben estar cerca de los electores y la combinación de plantear una circunscripción insular y otra regional plantea un choque de legitimidades entre los diputados”.
“No hay una circunscripción nacional en las Elecciones Generales, sino provincial, ni una europea en los comicios al Parlamento europeo, sino nacional, precisamente en base a ese concepto de cercanía a los electores”, afirmó.
Y es que para el catedrático, la propuesta incluida en el Estatuto “pudiera establecer diputados de primera y diputados de segunda” y ha dudado incluso de que “pudiera trasladarse ese sistema, que solo sucede en el Senado, que es una Cámara de segunda lectura, al Congreso de los Diputados”.
A este respecto, el socialista Ignacio Álvaro Lavandera, afirmó que “la existencia de dos tipos de senadores no los ha deslegitimado”, como a su juicio tampoco sucederá con los diputados canarios de la lista regional, que además, “acerca que el candidato a la Presidencia sea elegido por todos los canarios, que ahora no pueden elegirlo, acabando incluso con el hecho de que alguna vez incluso no se ha colgado su cartel en una isla concreta, porque no era conveniente”.
Sin embargo, el PP sí ha compartido las tesis de Villar al reconocer su portavoz, Miguel Jorge Blanco, que “al Grupo Popular no nos gusta mucho la circunscripción regional porque aleja al elector del elegido”.
La calidad democrática de la sobrerrepresentación
Sin embargo, sí que estuvo Blanco radicalmente en contra de otra de las tesis expuestas por Villar, en defensa de la triple paridad, pues el catedrático consideró que “la sobrerrepresentación de las islas menores es una apuesta del vigente sistema electoral por la mejora de la calidad democrática de las minorías”.
Para el catedrático invitado por CC, “la sobrerrepresentación supone tutelar a la minoría en un moderno Estado de Derecho no absoluto, es un derecho de las minorías”.
“No hay razones que hayan dejado sin motivos la vigente configuración del sistema electoral. ¿Sufren las islas mayores respecto a las islas menores? ¿Tienen menos hospitales? Eso no ha sucedido. ¿Inadmitir a trámite la Ley sobre los barrancos de Güímar fue una imposición de islas menores sobre mayores o fue decisión política mayoritaria?”, insistió Villar.
Y es que para el catedrático, “el conflicto es entre la población mayoritaria” de Tenerife y Gran Canaria “y la población minoritaria” de las islas no capitalina, “y no entre territorios”.
Al respecto, Blanco afirmó que “el actual sistema electoral no vale para responder a los anhelos de la sociedad canaria en su conjunto”, pues “la foto del Parlamento debe ser más parecida a la sociedad canaria”.
“Ha caducado que el 80 por ciento de los canarios elijan 30 diputados y que el 20 por ciento elija la otra mitad”, afirmó el conservador.
Por su parte, Luis Campos (NC), dijo que “las islas menos pobladas deben seguir siendo sobrerrepresentadas, pero debe haber más proporcionalidad que la actual” para que el sistema electoral “sea más justo” y “más representativo” de una realidad social que ha evolucionado con respecto a la que existía en 1982.
Sí a un diputado más en Fuerteventura
En el único punto pactado entre CC y el PSOE con el que Villar estuvo de acuerdo fue con el de otorgarle un diputado más a Fuerteventura, que en estos momentos elije menos escaños que La Palma teniendo aquella más población: “No me distorsiona esa corrección”.
Con todo, recordó que “sus diputados no se repartieron en función a La Palma sino a su provincia, es decir, con respecto a Lanzarote y Gran Canaria”.