El concejal de Seguridad de Mogán no suspenderá a uno de los policías condenados por torturar a un inmigrante senegalés

Uno de los dos policías locales de Mogán condenados por torturar a un inmigrante senegalés en 2011 continúa ocupando su puesto. El otro agente permanece en prisión por un delito de violencia de género. Así lo confirman fuentes policiales del municipio del sur de Gran Canaria, que aseguran que todo apunta a que el concejal de Seguridad del Ayuntamiento, Mencey Navarro, no suspenderá al policía que sigue en activo ni le abrirá ningún expediente disciplinario por ''razones de amistad''. Fuentes municipales han explicado que el concejal esperará a que la sentencia emitida por la Audiencia Provincial de Las Palmas sea firme, ya que aún es recurrible ante el Tribunal Supremo. Este periódico ha intentado contactar sin éxito con Navarro.

La sentencia ha condenado a ambos agentes, Gilberto J.M.R. y Carlos Javier Hernández Ramírez, a diez años de inhabilitación absoluta y a indemnizar a la víctima con 20.745,75 euros por lesiones, 2.936 por secuelas y 20.000 por daño moral, según informó este lunes el Tribunal Superior de Justicia de Canarias. Asimismo, el fallo declara también la responsabilidad subsidiaria del Ayuntamiento de Mogán en el abono de estas sumas.

Nueva Canarias ha exigido al concejal de Seguridad y primer teniente de alcalde que asuma su actuación “negligente” en este asunto, con el apoyo que el concejal parecía estar dando a los condenados con su presencia en el desarrollo del juicio. El cambio de actitud de Mencey Navarro ha sorprendido a Nueva Canarias. En la sesión plenaria del 20 de abril de 2014, cuando el concejal estaba en la oposición, Navarro exigió al exalcalde, Paco González, la apertura de un expediente disciplinario contra los agentes implicados en la agresión.

Una vez nombrado responsable de la gestión de la seguridad del municipio, “no hizo absolutamente nada” por tramitar este expediente, asevera Nueva Canarias. Por el contrario, Navarro sí suspendió de empleo y sueldo a otros cuatro agentes por “incumplir una orden de precinto”. Finalmente, la Justicia dio la razón a los agentes suspendidos, demostrando que el argumento del concejal de Seguridad era falso. La investigación concluyó con el archivo de todos los expedientes que impulsó Mencey Navarro.

La formación nacionalista ha subrayado que la abogada que asistió a uno de los policías procesados, Maria del Pino López Acosta, es la misma que defiende al primer teniente de alcalde de Mogán y también mano derecha de la alcaldesa, Onalia Bueno (Ciuca), en la causa por la que se le investiga por la comisión de un posible delito de amaño electoral.

La agresión de 2011

Según declara probado la sentencia, sobre las 21.40 horas del 8 de enero de 2011, los acusados, en su calidad de agentes de la policía local de Mogán, se encontraban prestando servicio vestidos de paisano en el Centro Comercial de Puerto Rico (Mogán).

En un momento dado, uno de ellos se aproximó al inmigrante, que se hallaba en la planta superior vendiendo collares en la terraza de un restaurante y, sin llegar a identificarse como agente de la autoridad, le requirió “para que le siguiese a un lugar apartado”, expone el fallo.

El perjudicado conocía a los agentes porque habían intervenido días antes contra un primo suyo que se dedicaba a la venta ambulante y que resultó lesionado en ese servicio policial, por lo que había sido citado o propuesto como testigo en el procedimiento iniciado por estos hechos.

Por ello, el perjudicado “sintió miedo por su integridad y salió corriendo, iniciándose una persecución por el centro comercial, desde la planta superior hasta el supermercado situado en la planta baja”, en cuyo interior uno de los encausados logró alcanzarlo, “le puso una zancadilla y tras caer este al suelo, le propinó dos fuertes patadas y un puñetazo, colocándose a continuación encima para inmovilizarlo”, detalla el fallo.