El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, negó este martes que se haya producido una “crisis de las microalgas”, así como cualquier relación de la proliferación de cianobacterias con los vertidos al mar de aguas residuales sin depurar, y anunció el próximo nombramiento de un comisionado para el cambio climático y la sostenibilidad.
Responsabilizar al Gobierno de Canarias de las cianobacterias es como responsabilizarlo del viento o de las altas temperaturas, dijo Clavijo en la sesión de control del pleno del Parlamento.
Admitió que puede haber habido errores en la política de comunicación del Ejecutivo, si bien acusó a medios de comunicación y a algunos representantes políticos “irresponsables” de pretender fabricar una realidad paralela.
El presidente pidió “sentido común, lealtad institucional, aportaciones positivas y huir de la demagogia y la falacia”, unas cualidades que solo reconoció durante la sesión de control al portavoz de la Agrupación Socialista Gomera (ASG), Casimiro Curbelo.
Clavijo aprovechó la pregunta de Curbelo sobre las cianobacterias para anunciar que próximamente se va a nombrar un comisionado para el cambio climático y la sostenibilidad, algo que ya tenía pensado “desde hace tiempo”, pero ha adelantado su anuncio para hacer frente a “la demagogia”.
El presidente reivindicó que ante la presencia de cianobacterias en las aguas canarias el Ejecutivo ha ofrecido abundante información por múltiples canales, toda ella “veraz” y basada en criterios científicos.
Aseguró que las informaciones sobre posibles efectos cancerígenos de las cianobacterias o sobre que no se pueda disfrutar de las playas de Canarias no tienen “ningún rigor científico”, pero en cambio pueden perjudicar al sector turístico si se publican en medios de comunicación de España, Alemania o Reino Unido.
“¿Crisis de las microalgas? Que alguien me explique cuál es la crisis, es un fenómeno natural” como el viento o las temperaturas, exclamó Clavijo.
“Tratar de responsabilizar al Gobierno, que no tiene nada que ver, es irresponsable”, agregó Clavijo, y se refirió al respecto, sin citarlo expresamente, al subdelegado del Gobierno en Santa Cruz de Tenerife, Guillermo Díaz Guerra, a quien le anunció que “ya le llegará el recadito”.
Posteriormente, a instancias de la diputada del PSOE Patricia Hernández, que consideró esa alusión al regalito como “una amenaza intolerable”, Clavijo se disculpó y retiró esas palabras.
Patricia Hernández acusó a Clavijo de pretender ocultar no tanto la crisis de las microalgas como los vertidos al mar de aguas residuales sin depurar.
La diputada socialista recalcó que según las encuestas el 76% de los ciudadanos cree que el Gobierno de Canarias ha facilitado información insuficiente y engañosa sobre las cianobacterias.
La eventual relación entre los vertidos y las cianobacterias es algo que no deben dilucidar los políticos, sino los científicos, quienes han señalado que es preciso hacer más estudios para demostrar o descartar alguna influencia, indicó Hernández.
La representante socialista acusó a Clavijo de haber impedido financiar con el Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan) las obras de infraestructuras hidráulicas propuestas por su propio consejero responsable del área, Narvay Quintero.
Clavijo respondió que el Fdcan incluye 302 millones de euros en obras hidráulicas propuestas por cabildos y ayuntamientos, algo que no habría sido posible si se hubiera cumplido el deseo de los socialistas de destinar ese fondo a gastos en sanidad, educación y políticas sociales.
“Podemos seguir alarmando, pero estamos en el camino de resolver los problemas”, dijo Clavijo en referencia al vertido de aguas residuales sin depurar al mar.
Insistió en que aunque se hayan producido errores en la comunicación, el Ejecutivo no va a dejar de “comunicar la verdad”, que, según sentenció, se resume en la falta de relación entre aguas residuales y microalgas.
La portavoz de Podemos, Noemí Santana, acusó al presidente de pedir que no se hablara de las microalgas e intentar ocultar esa realidad para no espantar a los turistas, algo que “no tiene cabida en democracia” y deja claras las prioridades de Clavijo.
El portavoz de Nueva Canarias, Román Rodríguez, consideró que la crisis no es la presencia de microalgas, sino la gestión que ha hecho el Gobierno de Canarias de este problema, en el que ha acusado a la opinión pública, a los medios de comunicación y a los partidos políticos de equivocarse.
En la misma línea, el diputado del PP Asier Antona consideró que el Gobierno de Canarias ha gestionado mal la crisis de las microalgas, pero peor ha sido su política de comunicación, y acusó al presidente de haber tenido miedo “de mojarse” y de anteponer a los técnicos y a sus consejeros.
El portavoz de ASG, Casimiro Curbelo, pidió que el Gobierno de Canarias se comprometa con una Canarias mas sostenible y que diseñe una estrategia de cuidado del medio ambiente “en función del crecimiento de la población y del crecimiento turístico”.