La Palma aspira a convertirse en un referente internacional en submarinismo. La Consejería de Turismo del Cabildo y la Fundación Philippe Cousteau han firmado este lunes un convenio de colaboración para impulsar el desarrollo de este producto náutico en el litoral. La presidenta insular, Guadalupe González, recordó que la Isla, en este campo, “tiene enormes posibilidades que no están suficientemente explotadas”. “Llevamos tiempo intentando armar este proyecto, y hoy damos un paso importante porque al trabajo que hemos venido haciendo en solitario incorporamos ahora el apoyo y asesoramiento de una fundación que es una de las más importantes del mundo en esta materia”, aseguró.
La firma del acuerdo se llevó a cabo en la sede del Cabildo con la asistencia del secretario general de la Fundación Philippe Cousteau, Rafael Lobeto, el almirante y presidente de la entidad, Gabriel Portal, y el director gerente, Eduardo Montero, junto al consejero insular de Turismo, Julio Cabrera.
El proyecto, según explicó González Taño, contempla “la creación de un arrecife artificial para el hundimiento de un pecio (uno de los elementos que más atractivo tienen para los submarinistas), la definición de las mejores zonas para la práctica del submarinismo, el asesoramiento a las empresas y centros de buceo de la Isla para generar un producto global y potente desde el punto de vista empresarial, y la promoción exterior del producto en las diferentes ferias”. Para llevar a cabo esta iniciativa, aseguró la presidenta, es “fundamental contar con un aval como la Fundación Philippe Cousteau”, a la que dio las gracias “por haber apostado por nuestra isla”. Añadió que el apoyo de esta reconocida entidad permitirá que “cuando salga nuestro producto lo haga con un reconocimiento internacional que nos enorgullece”.
En cuanto al perfil del turista que practica submarinismo, González Taño destacó que se trata “del segmento que más consumo produce, con un máximo nivel de gasto”.
Julio Cabrera explicó que para la creación del pecio se hundirá, el próximo mes de noviembre, un buque carguero de 56 metros de largo, que se está descontaminando en Gran Canaria, frente a las costas de Tazacorte y Tijarafe. “Se ha elegido para el hundimiento una zona de arenales donde hay poca vida”, ha asegurado el consejero de Turismo. En la tarde de este lunes, los expertos de la citada fundación realizarán las primeras inmersiones para estudiar el entorno marino. “La idea es generar vida y negocio alrededor del pecio”, ha precisado. El Cabildo también pretende involucrar en este proyecto a los colegios y centros de buceo de la Isla.
Los especialistas esperan que después del hundimiento de la embarcación, se comience a generar vida en unos seis meses, si bien el arrecife artificial no estará totalmente formado hasta los dos años. Los submarinistas podrán recorrer el interior de pecio y contemplar las diferentes especies que se desarrollen en fondo marino.
Este proyecto tiene un coste de 100.000 euros, aunque la Fundación Philippe Cousteau no participará en la explotación del mismo, solo se encargará de las labores de asesoramiento y control. Los gastos serán sufragados por el Cabildo y por las empresas que gestionen el producto, que cobrarán un canon.
El presidente de la Fundación, Gabriel Portal, recordó que “la creación de una Zona de Acondicionamiento Marino (ZAM) con el hundimiento de un pecio posibilita dos cosas: recrear el mundo del submarinismo dándole categoría y seguridad, y contribuir al desarrollo económico del entorno”. Portal aseguró que el proyecto impulsado por el Cabildo “es creativo e interesante e impulsa la actividad turística”. En este sentido resaltó que “en las costas españolas hay muy poco pecios, por lo que si La Palma ofrece un punto de buceo cómodo y práctico se convertirá en una atracción para Europa”.
Rafael Lobato, por su parte, señaló que la Fundación Philippe Cousteau “comparte con el Cabildo la sensibilidad por el mar, el medioambiente y por el turismo, por lo que vamos a combinar todo ello para que La Palma sea un referente en los mapas del submarinismo”. “Es muy importante que la isla defienda su cultura y su historia, pero es necesario que ese patrimonio se ofrezca, de forma positiva, como un atractivo turístico”. Lobato considera que La Palma “debe apostar por un recurso como el mar” y “ser referente internacional en submarinismo”.