Tres de las cuatro embarcaciones desplegadas desde 2006 por la Guardia Civil en las costas de Mauritania y Senegal para detectar pateras que partan con destino a Canarias se encuentran inoperativas. Una situación a la que se le suman los fallos registrados en los radares del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) en las últimas semanas y que la Benemérita declaró “información reservada”.
Según recogía este martes la Cadena Ser, las credenciales de la única patrullera de la Benemérita que se encuentra en funcionamiento en Senegal está a punto de caducar. A pesar de ello, el ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, visitó recientemente estos dos países y volvió a destacar la “eficacia” del operativo y de las relaciones para evitar la llegada de estas embarcaciones a Canarias.
Una de las patrulleras inoperativas, la Río Cabriel, se encuentra sin funcionamiento desde principios de diciembre y necesita ser reparada porque le entra agua a la embarcación. Además, la Río Cervantes, desde mediados de diciembre se le calientan los motores y la Río Guadalaviar también lleva tiempo sin operar, según ha podido saber Canarias Ahora..
No obstante, fuentes de la Benemérita subrayaron este miércoles a la Cadena Ser que las tres patrulleras desplegadas en Mauritania y que no están operativas volverán a estar disponibles en marzo y que actualmente están operando en la zona otras cuatro embarcaciones que fueron cedidas a estos países cuando era presidente José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE). También señalaron que en Mauritania hay 25 guardias civiles y ocho en Senegal, donde sí opera una de las cuatro patrulleras españolas.
La Asociación Unificada de Guardia Civiles (AUGC) ha anunciado que pedirá explicaciones al ministro ya que estas embarcaciones deben estar ocupadas por entre seis y ocho agentes y se está operando con menos. “Se trata de una muestra más de que los guardias civiles trabajan en condiciones que ponen en riesgo su vida”, subrayó este miércoles el portavoz de este sindicato en las Islas a Canarias Ahora.
Podemos también pedirá explicaciones a Zoido sobre el coste de la reparación de estas embarcaciones y por qué se utilizó una de ellas en un operativo de Frontex. Asimismo, la formación morada quiere saber cuánto costó el reciente viaje del ministro.
Fallos en el SIVE
A la falta de patrulleras de vigilancia en las costas de Mauritania y Senegal se le suma que las últimas pateras que han alcanzado las costas de las Islas no fueron detectadas por el SIVE. De hecho, la delegada del Gobierno en Canarias, Mercedes Roldós (PP), admitió “problemas técnicos” con este sistema tras la última tragedia ocurrida en Lanzarote en la que murieron siete personas y pidió un informe al Instituto Armado para conocer con detalle estos problemas.
En el caso de esta patera, que llegó el pasado 15 de enero la costa de Teguise, fuentes de la Benemérita han afirmado que era muy difícil que fuera detectada por el SIVE debido a las condiciones del mar. Sin embargo, no es la primera vez que esto ocurre.
Precisamente sobre esa embarcación, los supervivientes relataron la agonía que pasaron en el viaje. El pasado 20 de enero afirmaron en un juzgado en Arrecife que cuando vieron la embarcación se quisieron echar atrás pero que fueron amenazados para que zarparan.
En 2017 alcanzaron las costas canarias un total de 16 cayucos o pateras, 15 de ellas a la provincia de Las Palmas. En total, llegaron a las Islas en estas embarcaciones 423 personas, 37 de ellas menores de edad. En lo que va de año, la travesía para llegar a Canarias se ha cobrado la vida de siete personas. Además de la tragedia de Lanzarote, la pasada semana llegó a Maspalomas otra patera que fue detectada de madrugada por el SIVE.