El lugar escogido esta vez para la alianza entre el Partido Socialista y Nueva Canarias ha sido el Hotel Cristina, en la playa de Las Canteras, donde habilitaron un espacio para la prensa en la primera planta mientras los líderes de las organizaciones vivían los resultados sin ofrecer ninguna declaración desde la planta más alta del establecimiento de cinco estrellas.
A cuenta gotas llegaban las pocas personas que conformarían a penas la veintena cuando los candidatos al Congreso de los Diputados, Sebastián Franquis (PSOE) y Pedro Quevedo (NC), bajasen para hacer las primeras declaraciones.
Primero fue el sondeo de RTVE, donde se daba por hecho el 'sorpasso' y las pocas caras que allí se reunían no disimulaban su nerviosismo. Cuando se comenzaron a escrutar los resultados y el PSOE llegaba a situarse hasta en 92 escaños, algún tímido aplauso sonaba en la sala y todo eran sonrisas y alivio.
Pero el partido liderado por Pedro Sánchez se estancaría y vería perder hasta cinco diputados con respecto a las elecciones del 20D. En Canarias, sin embargo, no sólo mantenía el tipo sino que vencía en votos a Unidos Podemos, situándose como segunda fuerza.
Cuando ya estaba por encima del 60% escrutado, la provincia de Las Palmas no sólo revalidaba a sus dos candidatos, sino que obtenida un senador o senadora más con respecto a las elecciones del 20D. Por contra perdía un diputado por Santa Cruz de Tenerife.
La primera persona en bajar a atender a los medios antes de conocerse los resultados fue Juan Fernándo López Aguilar, quien fuera ministro de Justicia en el primer Gobierno de Jose Luis Rodríguez Zapatero.
Mostrándose comedido y moderado a pesar de que el 'sorpasso' estaba descartado, afirmó que al partido socialista “aún le queda mucho por hacer”, ya que considera que el papel que debe tener es “volver a ser Gobierno”, ya que “la misión del PSOE es derrotar al PP y todavía no lo hemos conseguido”.
Entonces entró en escena Pedro Sánchez en la pantalla, aplaudido por la veintena de personas que se reunían en el hotel, y leyó el resultado electoral como una muestra de que el PSOE es el partido “de referencia de la izquierda”, celebrando que no hubiese 'sorpasso' y lamentando que Pablo Iglesias no permitiera hace unos meses un “gobierno de cambio” al negarse a prestarle su apoyo.
Algo que enseguida fue refrendado por los candidatos Sebastián Franquis y Pedro Quevedo. La alegría era más que palpable en los rostros de los líderes.
El candidato por el PSOE, en la misma línea que Sánchez, declaró que los socialistas “recuperan la referencia política de la izquierda en Canarias y en Las Palmas”.
El candidato de Nueva Canarias, por su parte, manifestó que han “ganado a las encuestas” e hizo hincapié en que “además tendremos otro senador más, o senadora”, ante los aplausos y las sonrisas de los asistentes.
Una alegría que se ve refrendada hasta cierto punto en los resultados en Las Palmas, ya que, con el 23,80% de los votos superan muy levemente los resultados del 20D (22,38%), aunque recuperaron la segunda posición con respecto a Unidos Podemos (22,42%), muy lejos de los grandes vencedores (el PP con el 34% y un diputado más).
De hecho, en Las Palmas de Gran Canaria, la ciudad más poblada de Canarias, Podemos deja de ser la primera fuerza política (condición que había conseguido en las autonómicas de 2015 y en las generales de diciembre) y se ve relegada al tercer puesto, por detrás del PP y el PSOE-NC.
La alegría desmedida que mostraban tanto los candidatos como los militantes -alguno llegaba a afirmar “resistimos”- se debió al alivio por haber podido salvar los muebles tras las alertas de 'sorpasso'.