Alternativa Sí Se puede nunca se comprometió con la dirección de Podemos en Canarias a disolver su organización en la marca morada. Al menos eso señalan distintos dirigentes de la formación que recuerdan, además, que una decisión de ese calado solo podría ser adoptada en el marco de su Congreso, previsto inicialmente para 2016, pero que finalmente se ha ido aplazando y se desarrollará el próximo año 2017.
Sin embargo, Meri Pita, diputada al Congreso por la circunscripción de Las Palmas y secretaria de Podemos en Canarias, asegura que el acuerdo establecido era que Sí Se Puede se disolvería en Podemos. “Nos dijeron que lo llevarían a cabo pero nos solicitaron que les dejáramos un plazo razonable, que en su siguiente asamblea o congreso lo harían; luego, tras el proceso electoral, nos comunicaron que no sería así; y ahora nos ha sorprendido su implantación en Gran Canaria y otras islas”.
Esta aseveración es rechazada de plano por distintos integrantes de SSP consultados por este periódico, que aseguran que en ningún momento utilizaron la expresión “disolución” y que su futuro iba a depender de las resoluciones que se adoptaran en el Congreso de la formación que ha pospuesto su fecha de 2016 a 2017, probablemente por el largo período electoral vivido, primero con las elecciones autonómicas de mayo de 2015, y, posteriormente, con las generales de diciembre de 2015 y de junio de 2016. Fernando Sabaté, integrante de la coordinadora insular de SSP y consejero del Cabildo de Tenerife, que estuvo presente en las conversaciones entre la formación ecosocialista y Podemos confirma que “en ningún momento se planteó la disolución de SSP”.
“En menos de dos años hemos celebrado unas once asambleas de SSP y ahí se han podido expresar todo tipo de opiniones sobre el tipo de vinculación con Podemos”, destaca Sabaté, que indica que incluso alguna persona se dio de baja de la organización por no apoyar la confluencia entre las dos organizaciones. Y añade que una decisión colectiva de esa envergadura “es, como mínimo, de Congreso”.
Reconoce, por otra parte, que ha habido una disminución del entusiasmo hacia la formación morada por las desavenencias públicas que se han sucedido en Canarias y los rasgos de autoritarismo que han mostrado alguno de sus dirigentes.
Disolución o implantación
Aunque algunas personas dentro de SSP plantearon en 2015 la posibilidad de la integración plena en Podemos, dejando a SSP como una plataforma de reflexión, esto no fue aceptado en su momento por la mayoría de la organización ecosocialista. Por el contrario, y como hemos podido comprobar estos días, estaban trabajando por su expansión e implantación en otros territorios, especialmente en Gran Canaria, confluyendo en esta isla con el grupo de personas enfrentadas desde hace más de año y medio a la secretaria general y sus afines.
Dirigentes de SSP señalan su preocupación por la exigencia de disolución planteada en declaraciones a los medios por la secretaria de organización de Podemos en Canarias, Conchi Moreno. Y le dan la vuelta al órdago: ¿Por qué y para qué la disolución y no la convivencia plural y pacífica en el marco de Podemos o de confluencias amplias?, se preguntan. E insisten en que el modelo de SSP era y es el de un “Podemos canario”, con personalidad propia, plural, democrático y fuertemente enraizado en lo territorial y en lo municipal. En ningún caso, una mera sucursal del estatal.
DOCUMENTOS ANÓNIMOS
En un texto anónimo (bueno, firmado como Asínosepuede-Tenerife) que circula en las redes, El incompatible papel de Sí Se Puede en el desarrollo organizativo y político de Podemos Canarias, se indica que en su momento se produjo un pacto “ entre la dirección autonómica de Podemos y SSP según los cuales a nivel insular SSP iba a asumir el control de estructuras internas de la organización a cambio de dejar el Consejo Ciudadano y la dirección autonómica a Meri Pita”.
En el texto, muy crítico con la elevada presencia de personas vinculadas a la Universidad de La Laguna en SSP, se apunta a que el reseñado acuerdo entre el sector de la secretaria general y SSP “dura poco debido a los continuos incumplimientos y deslealtades al proyecto de Podemos por parte de SSP. El primero de estos graves incumplimientos fue faltar a su palabra inicial en la que más o menos públicamente habían afirmado que acabarían disolviéndose dentro de Podemos, cosa que posteriormente desmienten”.
Resulta cuanto menos curioso que un documento tan prolijo (aunque se le vislumbran varias inexactitudes y algunos análisis bastante simplistas) no haya sido firmado por ninguna persona. Aunque se supone que es alguien de la organización, que clama por la disolución de SSP. “De otra manera el modelo avasallador y clasista de SSP seguirá disputando día a día, asamblea tras asamblea, órgano a órgano el control de todo aquello que tenga que ver con la izquierda canaria y la organización ciudadana”. Y recuerda que los estatutos de SSP determinan que la organización “se disuelve cuando dos terceras parte de los participantes en un Congreso extraordinario así lo determinen.
Otro documento, del que desconozco también la autoría, ofrece un análisis distinto. “En el caso de Gran Canaria hay una característica importante, que es la presencia de Canarias por la Izquierda como eje central que ha constituido Podemos en Gran Canaria (tras un golpe de mano en una asamblea con métodos poco democráticos), junto a algunas personas que se fueron incorporando desde antes y durante la campaña”. Añadiendo que, tras las elecciones se incorporó mucha gente, haciendo que Podemos sea un espacio más abierto en Gran Canaria. Concluyendo que “algunos de los interrogantes a resolver en el futuro es el papel que va a jugar Canarias por la Izquierda: su peso real y lo que puede suponer de cara al desarrollo del proyecto”.