Sanidad es una de las áreas históricamente sensibles, donde las estadísticas no suelen dejar bien parada a Canarias, especialmente desde el comienzo de la crisis, pues ha ido mermando su presupuesto. En las últimas semanas, los profesionales del sector se han enfrentado a una saturación en los servicios de Urgencias hospitalarias. Se trata de una situación generada por una serie de carencias que llevan años reivindicando los profesionales del sector, que ven con incertidumbre el futuro tras el nombramiento del nuevo consejero, José Manuel Baltar, que es también el vicepresidente de la patronal de la sanidad privada.
¿Qué pasará con el Plan de Urgencias consensuado durante el período del exconsejero Jesús Morera?, ¿y con los conciertos sanitarios que estaba revisando la Consejería?, son algunas de las cuestiones que se plantean profesionales y sindicatos. Desde el pasado viernes se ha iniciado una ronda de reuniones entre estos colectivos y el consejero, pero hasta ahora sólo han supuesto una primera toma de contacto donde se le ha trasladado por escrito las principales reivindicaciones del sector.
Colapso del servicio de Urgencias
La gripe y las patologías agravadas por el frío y la calima registrada este invierno han sido los principales motivos que han agravado la saturación del servicio de Urgencias de distintos hospitales públicos de Canarias este último mes. Los trabajadores han llegado a asegurar que los pasillos parecían una auténtica yincana. Sin embargo, Carmen Nuez, portavoz del sindicato médico de Las Palmas advierte de que el verdadero pico se producirá a finales de enero y principios de febrero (como viene siendo el comportamiento habitual de la gripe en Canarias). Leopoldo Cejas, portavoz del sindicato de enfermería Satse, también recuerda que se trata de episodios que ocurren cada periodo invernal, donde aumenta la presión asistencial.
Actualmente, los hospitales están recibiendo una media de 300 pacientes al día en Urgencias y de seis personas a las que se da el alta entran otras diez a este servicio. La portavoz del sindicato médico y Leopoldo Cejas aseguran que no quieren ser alarmistas, pero consideran que es una situación que no se ha atajado por otros problemas de base, como las listas de espera en la atención primaria.
Durante el año y medio en el que Jesús Morera (PSOE) estuvo al frente de la consejería de Sanidad se trabajó para elaborar un Plan de Urgencias, en el que se hizo un intenso diagnóstico de la situación, además de consensuar con sindicatos y profesionales las medidas que debía incluir, muchas a corto, medio y largo plazo. El Plan finalmente no se llegó a ejecutar aunque sí que se han ido aplicando medidas como la apertura de nuevos espacios en algunos hospitales para hacer frente a la saturación.
Centros de salud las 24 horas al día o un aumento de la plantilla están entre las principales medidas que recogía este plan. “Queremos que se aclare si finalmente se seguirá adelante con él o se guardará en un cajón”, indican los sindicatos.
Atención Primaria
La portavoz del sindicato médico de Las Palmas insiste en que los problemas de Sanidad van en cadena, es decir, si no se hacen esfuerzos por mejorar la atención primaria se saturará el servicio de Urgencias. “No podemos tener un montón de centros abiertos donde lo único que tenemos es un médico con buena voluntad y un fonendo”, asegura.
Nuez aclara que hay muchos centros de salud que no cuentan con radiología básica o analítica básica, “no tenemos herramientas”. Con estas carencias en los centros “no arreglamos nada”, puntualiza, ya que si estuvieran mejor preparados no se tendría que enviar a los pacientes a los hospitales. No obstante, durante el mandato de Morera se mejoró en la implantación del servicio de radiología de los centros sanitarios, reconoce.
El sindicato alerta de que los centros de salud se están convirtiendo en antiguos ambulatorios en los que el paciente dice lo que le duele y el médico receta. Sin embargo, asegura que se está dejando a un lado la labor de prevención. “Todo lo que no controlemos hoy es un paciente que tendremos mañana”. En este sentido, insiste en que la ciencia ha alargado la esperanza de vida y ahora tiene que añadir calidad también.
Cejas, del sindicato Satse, también aboga por hacer una campaña sociosanitaria de prevención para que se efectúe un uso correcto de este servicio. Algo en lo que coinciden los médicos, aunque inciden en las mejoras de recursos de la atención primaria.
Listas de espera
Carmen Nuez lamenta que siempre se dé relevancia a la lista de espera quirúrgica, pero no a las listas de espera de la atención primaria. Hay otros servicios básicos por los que también espera el paciente como para una consulta de médico de familia o para una prueba diagnóstica.
La lista de espera en atención primaria asegura que es variable de un centro a otro, pero se producen principalmente por el hecho de que no se ponen sustitutos al personal que está de baja, razón por la que el médico debe dedicar menos tiempo a su consulta para atender también a los de su compañero.
Al final es la pescadilla que se muerde la cola, ya que si se satura la atención primaria y el paciente no obtiene una cita con el médico de cabecera hasta dentro de varios días o de una semana se saturará Urgencias.
En cuanto a la lista de espera quirúrgica, la Consejería aún no tiene actualizados los datos oficiales del último mes finalizado, en noviembre era de 30.970 pacientes esperando a ser intervenidos y la media de espera se situaba en los 126 días. Los sindicatos se cuestionan qué va a pasar con las listas de espera y si se van a contratar servicios con la privada.
Reivindicaciones del personal
Los profesionales también piden condiciones que les permitan alcanzar una estabilidad laboral. La carrera de medicina, por ejemplo, se compone de seis años al que se suma uno estudiando el MIR y entre cuatro y cinco la especialidad. Al cumplir los 30 años, “no se les puede ofrecer a estas personas un contrato de un día”, señala Nuez.
“Hay que dar estabilidad laboral para que los médicos se queden aquí”, subraya. Por ello, insiste en que se debe abrir de nuevo el debate de las oposiciones y llevarlo a la mesa sectorial.
Más personal también pide el sindicato Satse, que informa de que la ratio europea es de nueve enfermeros por cada 10.000 habitantes, pero la media estatal es de cinco por cada 10.000 y de cuatro en Canarias.
Sobre la contratación de personal también se ha pronunciado esta semana la Asamblea 7 Islas ya que alerta de que se están haciendo contrataciones por dos horas y media al día. Su portavoz, Octavio Sánchez, explica que se trata de los grupos C, D y E (administrativos, auxiliares y subalternos) y que tras las últimas oposiciones se ha cambiado el criterio, de manera que muchos empleados no están contratados por jornada completa y “no se pueden negar a coger el trabajo porque pierden su puesto en la lista”.
Sánchez tacha esta situación de “vergonzosa y surrealista” ya que se trata de personas que llevan tiempo preparándose el temario para optar a un puesto. “Hay personal con peores puestos en la lista que pueden optar a un contrato mejor que quien haya sacado una mejor nota”, indica.
Huelga de enfermeros con guardias localizadas
Los enfermeros, auxiliares y técnicos de rayos que trabajan mediante el sistema de guardias localizadas en los hospitales del Servicio Canario de Salud estuvieron durante el pasado mes de noviembre en huelga. Estos profesionales reclamaban una equiparación de sus condiciones con las de sus compañeros de atención primaria o médicos.
Entre los reclamos, que las horas se pagaran igual que a estos compañeros, que a los 55 años se pueda dejar de hacer guardias y que estas guardias no las hagan por semana sino por días, para respetar el tiempo de descanso. Estos profesionales señalan que llegaron a un acuerdo por escrito con el anterior consejero para que este asunto se lleve a la mesa sectorial. No obstante, pedirán una reunión con el actual consejero para trasladarle este asunto.
Conciertos sanitarios
Durante el periodo de Jesús Morera, la Consejería constituyó un equipo de nueve técnicos para revisar todos los conciertos sanitarios en vigor. Una labor que estimaban que terminarían casi a finales de este año y que ahora se desconoce si el nuevo consejero tendrá en cuenta el trabajo realizado.
La anterior Consejería tomó esta decisión ya que arrastraba conciertos sanitarios con empresas privadas desde la época preconstitucional. El 51% de los hospitales de Canarias es de titularidad privada. De los 22 centros, 16 mantienen conciertos con la Consejería de Sanidad.
El actual consejero, José Manuel Baltar llegó a asegurar en septiembre del año pasado en la Cadena Ser que inyectando 16 millones a la privada se podría acabar con las esperas. No obstante, tras su toma de posesión hizo hincapié en que estas declaraciones se hicieron en otro contexto, que “hay que ver más allá de los titulares” y que ahora habría que hacer un nuevo diagnóstico“.