El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, ha hecho un balance positivo de los dos primeros años de la presente legislatura, en la que encabeza un gabinete de coalición con el Partido Socialista Canario-PSOE.
Si bien ha reconocido que las cifras de desempleo y pobreza en las Islas “no son para estar contentos” y que el paro en Canarias “es un drama”, ha puesto en valor todas las acciones llevadas a cabo hasta el momento, lo que ha evitado que en el Archipiélago se haya producido “una fractura social. No es casualidad que con esas cifras no se hayan producido situaciones de fractura social, y no se han producido gracias a las medidas adoptadas por el Gobierno de Canarias”, ha asegurado.
Acciones que han permitido que “16.500 familias vivan en casas de la Comunidad Autónoma pagando entre dos y cien euros al mes”, o que “7.321 canarios disfruten de la prestación canaria de inserción (PCI)” y que se hayan destinado 30 millones de euros para políticas de menores en riesgo de exclusión social. En este sentido, también ha destacado el Plan de Empleo Social y el Plan contra la pobreza que el gabinete que preside aprobará definitivamente el próximo jueves, 18 de julio, para remitirlo al Parlamento y que la Cámara regional lo avale durante la celebración del pleno extraordinario previsto para final de mes.
Medidas de un Gobierno con un solo objetivo: “la defensa de unos servicios básicos que garanticen la cohesión social y territorial y, además, impulsar la reactivación económica. Hemos hecho una apuesta rotunda por la Sanidad pública y no hemos eliminado ningún servicio”, ha asegurado antes de resaltar que otro tanto ha sucedido con la Educación.
Efectos prácticos
“Los canarios verán los efectos prácticos de las políticas y las distintas actuaciones en los próximos dos años”, ha asegurado Rivero.
Según el presidente, “hemos trabajado para estar preparados cuando cambie esta dinámica diabólica” de contención del déficit público a base de recortes y sin inversión que ha puesto en marcha el Gobierno de España. Y es que para el presidente, Canarias tiene una “economía fuerte y sólida”, más incluso que la del resto de España, que está “paralizada” por las decisiones adoptadas por el Ejecutivo que preside Mariano Rajoy.
“Ya me gustaría tener los instrumentos para poder reactivar la economía, solo con la gestión de nuestros puertos y aeropuertos me conformaba”, ha afirmado. Porque, para el presidente, “la mejor manera de ser menos pobres es que haya oportunidad de trabajar, y eso solo se consigue generando actividad económica”.
Con todo, ha subrayado que Canarias, gracias al Ejecutivo que preside y a las medidas con las que han intentado “amortiguar” los efectos de las adoptadas por Rajoy, creció un 1,7% en 2011 frente al 0,4% nacional y que en 2012 el Archipiélago decreció menos que el conjunto del país, pese al incremento “incesante” de la población.
Rivero ha detallado que solo en 2012, y según cifras del INE (Instituto Nacional de Estadística), en España salieron 113.000 personas, mientras que las Islas crecieron en 17.000, de las que 3.000 correspondieron al crecimiento vegetativo. A ello se unen los 15.000 foráneos que arribaron al Archipiélago en 2011. Por ello, ha insistido en “priorizar” el trabajo para los residentes en Canarias, avalado por la Unión Europea, y que esa “cultura” se extienda a las empresas privadas.