El primer trasplantado de hígado en Canarias: “No era yo, era un muerto viviente”

Diez personas esperan un trasplante hepático y la tasa media de demora alcanza los 200 días, por debajo de la media nacional

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 23 (EUROPA PRESS)

El primer trasplantado hepático de Canarias, Armando López, ha afirmado este martes que antes de serlo no era él, “era un muerto viviente”. “Ahora estoy estupendamente, me siento joven”, ha añadido.

López se explicó de este modo durante el acto de celebración por el trasplante hepático número 400 en el Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria en Tenerife y reconoció que antes “estaba casi muerto, ni podía hablar”. Agradeció a los familiares del donante por su solidaridad y defendió que se done ya que se puede dar vida a muchas personas.

“Antes no podía hacer nada. Estaba muerto. Ahora pinto, lavo, hago de todo. La vida me ha cambiado un mil por mil. No era yo, era un muerto viviente”, ha resumido López quien fue trasplantado en abril de 1996.

El jefe de servicio de cirugía general del hospital, Armando Soriano, explicó durante el acto que el pasado 29 de agosto se llevó a cabo el trasplante número 400 y que la mujer ahora está en su domicilio dada de alta. Recordó además que éste es el trasplante más complicado ya que requiere “quitar el hígado enfermo”.

Soriano describió que el tipo de persona a la que se somete a estas intervenciones cuenta con unos cuarenta años y tiene el hígado cirrótico por culpa de un virus o alcoholismo. Precisó que también hay personas entre los 15 y 30 años y que el 90 por ciento continúa vivo un año después de la operación. Se refirió además a que las encuestas desvelan que el 85 por ciento de los trasplantados destacan su calidad de vida.

La gerente del HUNSC, Mercedes Cueto, explicó que cada operación cuenta con unos 60 profesionales y requiere una técnica complicada. Subrayó que el dispositivo está en marcha los 365 días del año al tiempo que animó a que se continúe haciendo donaciones en las islas.

En igual sentido se pronunció el coordinador regional de trasplantes de Canarias, Aurelio Rodríguez, quien dijo que en las islas hay una alta tasa de donación y sólo el 12-14 por ciento se niega a hacerlo. Las cifras están por debajo de la media. Rodríguez recordó que el primer trasplante realizado en Canarias cumplirá 30 años el próximo mes de febrero.

En este punto, el jefe de servicio de cirugía general del hospital, Armando Soriano, quiso precisar que la lista de espera es muy “variable” pero que la selección de candidatos obedece a criterios de “gravedad”. Expuso que hay quienes deben esperar un año. Alertó además del descenso de las donaciones que vinculó al descenso de accidentes de tráfico.

Aquí Rodríguez prosiguió especificando que además de priorizar a los más graves, también se tiene en cuenta el tipo sanguíneo. “La tasa de espera de media de trasplante de hígado alcanza los 200 días, que es inferior a la media nacional”, informó para exponer que hay diez personas en la Comunidad Autónoma que esperan un trasplante.

Por último, el consejero de Sanidad, Fernando Bañolas, agradeció a las personas anónimas que donan su acto generoso y especificó que el primer trasplante en el archipiélago fue de riñón en 1981. El simultáneo de riñón y páncreas llegó años después y el primero hepático en la década de los noventa.