La principal proveedora de los servicios de seguimiento de medios y apoyo a los gabinetes de prensa del Gobierno de Canarias, Metrópolis Comunicación, aplica desde hace años una política laboral que incluye el mantenimiento en plantilla de periodistas sin contrato y el pago en negro de parte del salario a trabajadores en nómina, camuflado en conceptos como gastos de transportes y dietas que no cotizan a la Seguridad Social. El abono se realiza en sobres, a mes vencido. En los casos que ha podido contrastar Canarias Ahora a través de idénticas pruebas documentales, recibos sin membrete de la empresa, el dinero ingresado por esta vía puede llegar a representar hasta el 40% del sueldo.
Junto a MasCanarias, otra sociedad administrada por el mismo empresario, Metrópolis acapara prácticamente el 80% de los contratos de comunicación que el Gobierno canario ha adjudicado en los últimos cinco años. El fundador y director de ambas agencias, con sedes en La Laguna, es Santiago Pérez, miembro de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) y de la Asociación de Directivos de la Comunicación (DIRCOM).
El testimonio aportado por varios extrabajadores de Metrópolis que prefieren mantenerse en el anonimato por miedo a represalias, unido a documentos recabados por este periódico, revelan una práctica sistemática de pago para eludir obligaciones con la Seguridad Social. Por un lado, mediante la incorporación de periodistas a la plantilla sin contrato, por lo general para realizar labores de clipping, es decir, para recopilar informaciones aparecidas en los medios de comunicación sobre un determinado organismo o empresa.
Así lo acredita, por ejemplo, la mención realizada en el boletín interno de la agencia al trabajo realizado por un periodista en una fecha en la que, según su vida laboral, no estaba dado de alta en la Seguridad Social como trabajador por cuenta de Metrópolis ni ejercía con el régimen de autónomos. Según relatan, la dirección de la agencia les exigía resultados para poder obtener un contrato como “premio”.
Los extrabajadores que acabaron siendo dados de alta en la Seguridad Social por esta empresa también coinciden en la descripción de la fórmula para pagar el salario. Este periódico ha tenido acceso a uno de esos contratos, de obra y servicio, asociado a una adjudicación de una consejería del Gobierno de Canarias. Es de 20 horas semanales, sin pacto de horas extra. Los pliegos de la Administración regional para este tipo de adjudicaciones requieren periodistas en exclusiva para el servicio y recalcan la necesidad de un sistema de guardias las 24 horas del día los 365 días al año. En el caso analizado, la jornada laboral se completaba con otras cuatro horas de trabajo fuera de contrato y nómina. “Recibe de Metrópolis Comunicación, SL (...) la cantidad de (400) euros en concepto de gastos de transportes y dietas, durante el mes de JULIO de 2017”, recoge el documento que acompañaba al sobre con el que se abonaba esa parte del sueldo.
Los gastos de dietas y de transportes fuera del centro habitual de trabajo no cotizan a la Seguridad Social. Además, el gasto en dietas es deducible en el Impuesto de Sociedades. El uso de esta fórmula de pago para enmascarar una parte del salario y así ahorrarse cargas sociales se ha disparado desde el estallido de la crisis y puede representar un fraude a la Hacienda Pública y un delito contra los trabajadores. Las fuentes consultadas señalan que, en el caso de Metrópolis, esos gastos nunca se justifican y que los empleados en esta situación realizan la práctica totalidad de sus funciones en sus centros de trabajo.
Los pliegos de los concursos convocados por el Gobierno de Canarias en materia de comunicación fijaban como causa de resolución del contrato el “incumplimiento parcial o cumplimiento defectuoso” de la legislación laboral, de la Ley de Contratos del Sector Público y el Reglamento General de la Ley de Contratos de la Administración Pública.
La dirección de Metrópolis sostiene que esos recibos se utilizan “para anticipos que solicitan los trabajadores, algún préstamo que piden a la empresa, o gastos de transporte y dietas que corresponden a viajes (esos importes son abonados por la empresa con posterioridad)”. En la respuesta ofrecida a las preguntas formuladas por Canarias Ahora, la adjudicataria de cuantiosos contratos de comunicación con el Gobierno canario cifra en 243.000 euros los pagos realizados el año pasado a la Seguridad Social.
Según los datos proporcionados por la propia empresa, la plantilla de Metrópolis está integrada por 35 profesionales, que se reparten entre las cuatro sedes de Canarias (Gran Canaria, Tenerife, Lanzarote y La Palma), Madrid, Andalucía, Baleares y Valencia. Todos ellos están contratados “de conformidad a la legislación vigente y reciben su salario a través de su nómina”, afirma.
También cuenta con una red de colaboradores autónomos (fotógrafos, diseñadores gráficos, desarrolladores de aplicaciones..-) y ha firmado convenios para alumnos en prácticas con la Universidad de La Laguna (ULL), la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), la Universidad Rey Juan Carlos, la Universitat Abat Oliba CEU de Barcelona, la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA) y el Centro de Estudios Financieros (CEF).
Una relación de 17 años
Los primeros contratos de Metrópolis con la Administración regional se firmaron hace 17 años. Sin embargo, ha sido en los últimos dos cuando más se ha reforzado su posición en un sector que cuenta con más de 30 empresas en las Islas. La llegada del gabinete de Fernando Clavijo en 2015 trajo consigo un cambio de modelo en la contratación de los servicios de comunicación que ha tenido a la empresa de Santiago Pérez como la principal beneficiaria.
Desde febrero de 2016, el Ejecutivo ha aunado en los contratos el servicio de apoyo a los gabinetes de prensa, la fortaleza histórica de la agencia por su experiencia de años en este mercado, con el de seguimiento de medios de las diferentes consejerías, que hasta entonces estaba centralizado para todo el Gobierno en una sola empresa. A partir de ese momento, Metrópolis se ha hecho con la práctica totalidad de las adjudicaciones. La mayoría de ellas, a través de negociados sin publicidad, un tipo de procedimiento excepcional en el que el órgano de contratación acude a una o varias empresas y negocia las condiciones, siempre que el presupuesto de licitación no supere los 60.000 euros.
El último de ellos lo ha firmado con el Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria, en la isla de Tenerife, por un importe de 51.231,60 euros. El complejo solicitó oferta a tres empresas, dos de ellas dedicadas en exclusiva al sector de la publicidad y la planificación de medios. Sólo la presentó Metrópolis. El objeto del contrato era la prestación del servicio de “gabinete de prensa, dossier de prensa regional y nacional, publicidad y protocolo para el hospital”.
Metrópolis también se ha hecho en estos dos últimos años con la mayoría de los concursos convocados, a excepción de uno en la Consejería de Sanidad. Empresas de la competencia ya advirtieron desde la implantación del nuevo sistema de contratación que los pliegos repetían miméticamente cláusulas que suponían un “traje a la medida” de la principal proveedora de servicios de prensa del Gobierno de Canarias. En los dos últimos ejercicios ha recibido más de 700.000 euros.
En el argumentario interno que difunde ante cada información publicada sobre sus contratos con el Gobierno de Canarias, la dirección de Metrópolis reduce esas quejas a “una pataleta de una empresa que no ha sabido adaptarse a las nuevas necesidades de mercado”, en referencia a MMI Canarias, que centralizó todo el servicio de seguimiento de medios del Ejecutivo durante años. “Nos limitamos a presentarnos a los pliegos y las bases que determine cada administración. Unas veces ganamos y otras, perdemos”, explica el director a sus empleados.
La cartera de clientes de Metrópolis es extensa. Además de para el Gobierno de Canarias. la agencia ha trabajado, entre otros, para cinco de los siete cabildos de la isla (Gran Canaria, Tenerife, Lanzarote, La Palma y La Gomera); para instituciones como el Parlamento de Canarias, la Audiencia de Cuentas o la Televisión Autonómica; para partidos políticos y para destacadas empresas canarias y nacionales, públicas y privadas, de sectores tan diversos como la sanidad, la aviación, el transporte terrestre, el turismo, la energía, alimentación y bebidas, deporte, ocio y cultura.