UGT de Tenerife denunció este viernes en rueda de prensa la penosa herencia que a su juicio dejarán al próximo gobierno la consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Marisa Zamora, y el director general del Menor, José Luis Arregui, respecto a la situación de los centros de menores del Archipiélago.
Tanto los centros para menores con medidas judiciales como los centros para menores inmigrantes carecen de todo tipo de material y no se cumplen sus funciones educativas, pese al elevado presupuesto que supuestamente se les destina, denunciaron el secretario general de UGT de Tenerife, José Juan Benavente, y el secretario de Organización insular, Sixto Rodríguez.
Benavente afirmó que para los centros de menores inmigrantes se han destinado desde 2004 doce millones de euros por parte del Estado y nueve por la Comunidad Autónoma, y se preguntó “dónde está esa millonada” cuando en centros como el de Nivaria, cuya clausura reclama UGT, se han producido hasta casos de sarna.
Reprochó a Arregui que se vaya de la Dirección General del Menor para ser concejal en El Rosario sin ni siquiera haber hecho un balance de su gestión, la cual ha supuesto “el incumplimiento en el fondo y en la forma de la Ley de Menor”.
Durante la gestión de Zamora y Arregui ha habido en los centros de menores con medidas judiciales “fallecidos, problemas de orden público, conflictos, lesiones, coacciones, miedo, burlas a los familiares y una falta de garantías constitucionales absoluta hacia los menores y los profesionales”, afirmó el representante sindical.
Sixto Rodríguez acusó a la Administración de poner obstáculos a la rehabilitación de los menores y reprochó a los responsables de la Consejería que ante las cámaras y los micrófonos los traten como “sus niños” y en privado usen “la jerga de los recintos penitenciarios”.
También denunció que la Consejería, pese a los requerimientos de la Inspección de Trabajo, se ha negado a facilitar el balance de cuentas de la Fundación Ideo, que preside Marisa Zamora y que tiene encomendada la gestión del centro de Valle Tabares, supuestamente un centro modelo.
Sin material educativo
Los cinco maestros que han estado trabajando allí desde septiembre de 2006 se han encontrado con que hasta enero no dispusieron de material educativo y que incluso tuvieron que sustituir pizarras con cajas de cartón.
A partir de enero, con el nuevo ejercicio presupuestario, sólo les facilitaron 500 euros para comprar material, pero no obtuvieron ni un proyector ni un magnetófono para que los menores pudieran escuchar cintas en inglés.
La única funcionaria entre esos cinco maestros -los demás son interinos- ha decidido no continuar el curso próximo ante la falta de posibilidades para ejercer su trabajo educativo, indicó el representante sindical, y denunció también que a los menores con más de 16 años ni siquiera se les ha querido homologar su título.
Los sindicalistas también criticaron la pasividad de los tres principales partidos en el Parlamento de Canarias ante esta situación, CC, PP y PSOE, ya que en la comisión parlamentaria que estudió este asunto no se molestaron ni en corroborar los datos facilitados por la Consejería y que, según ellos, no eran exactos o directamente falsos.
José Juan Benavente se preguntó, a la vista de la trayectoria de José Luis Arregui al frente de la Dirección General del Menor, qué va a hacer si sale elegido concejal en El Rosario, donde está el centro Nivaria para menores inmigrantes, cuyo cierre reclama UGT.
Según Benavente, el director general del Menor defiende la creación de macrocentros para los menores inmigrantes.