Más coches eléctricos, ¿más CO2?

Poner más coches eléctricos en la carretera podría aumentar las emisiones de carbono a menos que usen energía verde, según el informe Electricidad verde para los coches eléctricos. Desarrollo de recomendaciones políticas para aprovechar el potencial climático de los vehículos eléctricos independiente encargado conjuntamente por Amigos de la Tierra, Greenpeace, Transport & Environment y WWF-Alemania a la consultora CE Delft. Las organizaciones ecologistas piden objetivos nacionales más ambiciosos de participación de las renovables en el mix energético para garantizar que los vehículos eléctricos sean verdaderamente de “cero emisiones”.

Con motivo del consejo informal de ministros de competitividad que se está celebrando en San Sebastián y en el que se espera que este martes se anuncie un plan de acción de la UE para los coches eléctricos, el estudio presentado este lunes en toda Europa advierte de que la legislación comunitaria existente en materia de emisiones de CO2 de los automóviles es deficiente puesto que permite a los fabricantes utilizar las ventas de vehículos eléctricos para seguir compensando la producción de automóviles extremadamente contaminantes.

Los llamados “súpercréditos”, contemplados en esta legislación, permiten a los fabricantes de automóviles vender 3,5 vehículos de elevadas emisiones por cada coche eléctrico que vendan, sin que esto afecte a su objetivo global de reducción de las emisiones de CO2. Según el informe, si se llegara a cubrir un 10% del total de la venta de coches con vehículos eléctricos, esto podría conducir a un aumento del 20% del consumo de petróleo y de las emisiones de CO2 del sector automovilístico europeo.

Las organizaciones ecologistas exigen que se eliminen definitivamente los “supercréditos” de las actuales y futuras normativas europeas en materia de emisiones de CO2 de los vehículos, empezando por la propuesta de normativa europea sobre emisiones de los vehículos comerciales ligeros actualmente en discusión. Las organizaciones hacen un llamamiento para que todos los coches eléctricos vendidos en el mercado de la UE estén equipados con contadores inteligentes, una tecnología que permite que los vehículos sólo se recarguen cuando haya un excedente de electricidad renovable en la red eléctrica. Para que esto sea posible, la UE deberá también asegurar una mayor oferta de electricidad renovable.

“El Gobierno español debe garantizar que, en los planes de fomento del coche eléctrico de la UE, se incluyan medidas que aseguren la introducción de vehículos eléctricos inteligentes, que se recarguen con energía verde a través de una red eléctrica inteligente”, ha declarado Sara Pizzinato, responsable de la campaña de Transporte de Greenpeace. “De lo contrario, solo aumentaría la demanda de electricidad generada con carbón y nuclear, lo que nos alejaría de un futuro 100% renovable”.

“Los coches eléctricos pueden ser parte del cambio hacia un modelo de transporte más sostenible, pero es fundamental que vaya acompañado de un compromiso sólido para garantizar que funcionan con electricidad renovable. También deben tomarse medidas para reducir la demanda de movilidad”, ha declarado Alejandro González, responsable del área de Cambio climático y Energía de Amigos de la Tierra. “Si las personas conducen coches eléctricos sin importar si se abastecen de una fuente insostenible, seguirán aumentando las emisiones”.