MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
Las inundaciones récord que han afectado Pakistán siguen cobrándose un ingente número de víctimas en zonas rurales en la zona este de Baluchistán (oeste), una región ya de por sí muy castigada por la violencia armada, según aseguró este viernes el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), que señaló que a medida que se retiran las aguas, unos 600.000 desplazados por las inundaciones se preparan para regresar a lo que queda de su hogar.
“Las aguas, que se han cobrado vidas y han devastado los medios de sustento a lo largo y ancho de Pakistán, han dañado con particular dureza a los habitantes de Baluchistán”, afirmó el jefe de la subdelegación del CICR en Quetta, Adrian Zimmermann. “A causa de los problemas de seguridad, del aislamiento y de las limitaciones a la libertad de circulación impuestas a nuestro personal, las necesidades de estas personas en víveres, agua, cobijo y medicinas se han acrecentado”, lamentó.
“El CICR, junto con la Media Luna Roja de Pakistán, está preparado desde el punto de vista operativo y logístico”, indicó Zimmermann. “Ya hemos realizado operaciones para ayudar a 350.000 víctimas de las inundaciones en Baluchistán, pero necesitamos poder acceder mejor a la población necesitada”, explicó.
A principios de septiembre se trasladaron alimentos para 70.000 afectados por las crecidas, desde el recientemente establecido centro de logística del CICR en Karachi hasta los almacenes de las ciudades de Quetta y Sibi, en Baluchistán, y se empleará una flota de camiones pesados para distribuirlos con la mayor celeridad.
En Baluchistán, el CICR mantiene su ayuda a las unidades de salud de la Media Luna Roja de Pakistán. Una clínica móvil circula por las áreas afectadas por las riadas y atiende a más de 2.000 damnificados por semana.
Por otra parte, se sigue prestando asistencia a unas 200.000 personas desplazadas por los combates en Jyber Pajtunjwa, en el noroeste del país. En cooperación con la Media Luna Roja de Pakistán, el CICR ha distribuido hasta ahora raciones de alimentos para un mes y artículos de aseo a más de 375.000 víctimas de las inundaciones, y artículos de primera necesidad y material para alojamiento a otras 240.000 en todo el país.
Por último, el CICR y la Media Luna Roja de Pakistán emprendieron una operación conjunta de asistencia para proporcionar hasta a 1,4 millones de personas raciones de alimentos para un mes, y a otras 700.000 artículos no alimentarios en Jyber Pajtunjwa, las áreas tribales bajo administración federal, Baluchistán, la parte de Cachemira paquistaní y cinco distritos de Sindh y de Punjab.