La Federación Canaria de Islas (Fecai) se reúne este miércoles con los trabajadores de la Televisión Canaria que mantienen una huelga reclamando que la empresa concesionaria de los servicios informativos, Videoreport, negocie un convenio colectivo.
Los trabajadores de Videoreport que se estaban manifestando ante el Parlamento de Canarias han hablado con el presidente del Cabildo de Lanzarote, Pedro Sanginés, que ostenta la presidencia de turno de la Fecai, cuando éste se dirigía a la cámara autonómica para participar en la reunión de la Comisión General de Cabildos que se celebra este miércoles.
Sanginés se comprometió a reunirse con los trabajadores tras la finalización de la Comisión. Los trabajadores aseguran que el presidente de turno de la Fecai se mostró preocupado por la incidencia que la huelga está teniendo sobre los informativos insulares de la Tv Canaria.
Los informativos insulares habían sido una petición en la que las Islas no capitalinas insistieron desde el inicio de las emisiones de la televisión autonómica. Su emisión, que se realizaba desde hace algunos años, se ha visto interrumpida a partir del conflicto que los trabajadores mantienen con la empresa, que es quien ha puesto sus propios servicios mínimos consistentes en la emisión, exclusivamente, de los informativos regionales enlatados, sin presentadores en el estudio.
Séptima jornada
La de este miércoles es la séptima jornada de huelga de los trabajadores. El martes también se manifestaron ante el Parlamento de Canarias, donde el director general de Radiotelevisión Canaria, Willy García, debía comparecer.
Willy García abandonó la cámara pasadas las 18:15 horas, tras ocho horas de estancia en la misma, pese a que la comisión había finalizado alrededor de las 14:00. Los trabajadores siguieron al director general durante varios minutos por las calles aledañas y grabaron su salida, mientras era protegido por la Policía Nacional.
Tras el último pleno del Parlamento, los trabajadores también pitaron a su salida al presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, quien no tuvo ningún problema en salir a la calle y aguantó estoicamente la pitada. De esta forma, los trabajadores protestan por la “imposición” de un convenio colectivo por parte de la empresa adjudicataria, que según han denunciado, supondrá una merma salarial “cercana al 20%”.