La incidencia de la gripe en Canarias en esta temporada de invierno es ya epidémica según los datos de la Red Nacional de Vigilancia Epidémica del Instituto de Salud Carlos III, que apunta que también lo es en Castilla y León, Asturias y Madrid.
Los expertos indican que las temperaturas más cálidas de lo habitual para esta época registradas este año podrían estar “retrasando y limitando la extensión del virus”.
“El tiempo agradable no favorece la extensión del virus de la gripe”, señala el doctor Juan Carlos Galán, jefe de virología del Hospital Ramón y Cajal de Madrid. Este experto indica que las temperaturas bajas y la humedad seca son los factores más proclives para la difusión de la gripe en nuestro hábitat. Dos condicionantes que este año se están dando en menor medida en España, provocando por tanto que la epidemia de la gripe se esté retrasando y que se extienda más en el tiempo.
Según indica Galán, el patrón de la gripe de este año es muy similar a la epidemia del 2012. “La ventaja es que si se replica este modelo, la incidencia de gripe que tendremos será menor”.
Congestión, tos, dolor de cabeza, malestar, dolores articulares y fiebre son algunos de los síntomas más comunes de un cuadro gripal. Los grupos de riesgo son, además de los niños y ancianos, las personas con enfermedades crónicas. Este experto insiste en la necesidad de vacunar a las personas con factores de riesgo para evitar cuadros de gripe más graves.
La principal diferencia entre la gripe y el resfriado es que este último no cursa fiebre, tal y como informa el doctor Galán. Este experto recomienda acudir al centro de salud a aquellas personas que, sintiendo los síntomas de la gripe, pertenezcan a los grupos de riesgo para que un profesional sanitario pueda valorar y tratar el estado del enfermo. El principal tratamiento de una gripe sin complicaciones continúan siendo los antigripales.