Los hospitales canarios viven un episodio semejante al registrado durante el primer confinamiento, cuando se notificaron las cifras más altas de ingresados en planta y UCI. Sin embargo, a diferencia de la principal carga que representaron los mayores de 70 años en la primavera del curso anterior, en esta ocasión destaca la alta presencia de jóvenes en los complejos sanitarios: en julio ingresaron uno de cada tres canarios menores de 40 años que han sido hospitalizados por COVID este año, un total de 190, según los datos arrojados por el Instituto de Salud Carlos III, que aún debe consolidar los valores de la última semana.
La curva de hospitalizados está en máximos desde el primer confinamiento. A fecha de este lunes hay 467 personas hospitalizadas por COVID en Canarias, un dato algo inferior al récord contabilizado el 29 de marzo de 2020, con 489 pacientes. Es importante recordar que las comparaciones con la primera ola de la epidemia podrían llevar a conclusiones difusas, sobre todo en aquellas regiones donde el virus estaba muy expandido y no había camas ni test suficientes. Pero el Archipiélago fue una de las comunidades que más airosa salió, por lo que no debería haber tanta diferencia entre las cifras verdaderas y las oficiales.
Con las hospitalizaciones este julio, eso sí, no hay dudas. A principios de mes las Islas reportaban alrededor de 150 ingresados por la enfermedad, un número que se ha multiplicado por tres en apenas cuatro semanas. En la Unidad de Cuidados Intensivos ha pasado lo mismo: de 25 casos a finales de junio a 95 este 1 de agosto. Si la tendencia ascendente continúa, ambos indicadores registrarán en los próximos días sus peores cifras de toda la pandemia. No hay ninguna autonomía en una situación similar.
Lo más lógico es que tanto en UCI como en planta se dé el escenario más crítico que ha vivido Canarias en año y medio. La incidencia acumulada (IA) en los últimos 14 días ya no crece al mismo ritmo, pero los datos de contagios diarios siguen siendo muy altos, en torno a los 600. Y a eso hay que sumarle que la presión en los hospitales comienza a sentirse de media dos semanas más tarde tras la explosión de los casos.
Además, la tasa de hospitalización, esto es, el número de personas que ingresan por cada 100 casos, se mantiene estable en todos los grupos de edad. Para los mayores de 70 años está entre el 30 y el 50%, o lo que es lo mismo, de cada 10 mayores de 70 que se contagian en las Islas ingresan de media entre tres y cinco; para los que tienen entre 40 y 69 (7 y 10%) y entre 20 y 39 (2 y 3%).
Quiénes están necesitando atención sanitaria
La franja de edad con más ingresos por coronavirus en Canarias en el mes de julio fue la de 40 a 49 años, con un total de 139. Le siguen los que tienen entre 30 y 39 (105), 50-59 (83), 20-29 (70), mayores de 80 (69), 70-79 (60), 10-19 (9) y 0-9 (6). Son los jóvenes o los de la generación del baby boom los que más están sufriendo la escalada del virus. Son los que, en líneas generales, aún tenían un amplio margen de personas sin vacunar antes del verano
Podemos analizar la evolución de los menores de 40 años de manera detallada. En agosto de 2020 se reportaron 62 hospitalizaciones en este grupo poblacional. El dato mes a mes apenas ha cambiado hasta este julio, cuando se han registrado 190. En proporcionalidad con el total de hospitalizados la variación es parecida, pero menos pronunciada. Han pasado de representar el 20,2% de las hospitalizaciones al 30,4%.
Una buena noticia
A pesar de lo que ha supuesto julio para Canarias, con la explosión de contagios y la imposibilidad de dictar medidas de protección por las resoluciones en contra del Tribunal Superior de Justicia, hay espacio para las buenas noticias y comprobar, una vez más, el efecto de las vacunas.
Este ha sido el mes con menos muertes por cada 100 casos de coronavirus desde que tenemos datos. Se han notificado (a la espera de que el ISCIII consolide los valores de la última semana) 14.267 infecciones y han muerto 25 personas a causa del virus, una ratio de 0,18 defunciones por cada 100 contagios. La diferencia con noviembre de 2020, el peor mes del último año, es notoria: con 3.591 positivos y 56 decesos, la ratio se situó en 1,56 decesos por cada 100 diagnósticos.