Huelga de recogida de basuras en el Sureste

El Frente Sindical Obrero de Canarias (FSOC) anunció este domingo que los trabajadores de las empresas del Grupo C.A.S. (Camilo Álvarez Sánchez) de recogida de residuos sólidos como de barrido en la Mancomunidad del Sureste de Gran Canaria y en el municipio de Arucas (RINCA) comenzarán una huelga a las 00.00 horas del 31 de diciembre en protesta por el impago de salarios y pagas.

El sindicato informó en un comunicado de que, por los mismos motivos, ayer comenzó la huelga en los municipios de Granadilla de Abona, en Tenerife y agregó que en San Miguel “sólo se trabaja a horario”.

Explicó que el incumplimiento del pago de los salarios y de las pagas que se adeuda a los trabajadores de los meses de noviembre, diciembre son los motivos por los que se realiza esta huelga.

“Estos constantes incumplimiento pone a los trabajadores en una situación desesperante en las fechas en las que estamos, donde los salarios y los atrasos no se corresponden con el trabajo diario que realizan, teniendo en cuenta que esta situación creada por la empresa perjudica a todos los vecinos y vecinas de estos municipios”, agregó el sindicato.

Por ello, el FSOC hizo un llamamiento “a la clase obrera para que apoye dicha huelga y a la sociedad canaria para que no se permita que estas empresas que realizan un trabajo de primera necesidad en nuestros municipios incumplan algo tan fundamental como el pago de los salarios a sus trabajadores”.

Sin embargo, el grupo de empresas Camilo Álvarez Sánchez Grupo CAS precisó en otro comunicado que “la práctica totalidad” de los 1.300 trabajadores que prestan servicios en municipios de las islas de Tenerife, Lanzarote, Gran Canaria y Fuerteventura “hasta el día de hoy han cobrado sus nóminas, la mayoría con regularidad, aunque existen pendientes de pago un mínimo grupo de nóminas, así como pagas extra y otras obligaciones derivadas de los convenios colectivos”.

“Es importante considerar que la mayor parte de los trabajadores han cobrado con mayores o menores retrasos sus nóminas dentro del mes siguiente a su vencimiento, salvando otras cantidades derivadas del convenio en las que existe una demora en el pago, así como otras obligaciones de las empresas”, afirmó el grupo empresarial.

Corporaciones locales

El origen de esta situación, explicó, “está en la situación financiera de algunas corporaciones locales que, en conjunto, tienen pendiente de pago una suma superior a los 35 millones de euros a las empresas del Grupo CAS”.

Las empresas del Grupo CAS subrayaron que “vienen haciendo frente a esta situación con la mayor diligencia posible reclamando de una parte a las corporaciones locales la deuda pendiente y gestionando en un marco económico extraordinariamente difícil los recursos necesarios para cumplir su principal obligación: la retribución de las nóminas de los trabajadores del Grupo CAS”.

La dirección del Grupo CAS recordó que ha venido informando puntualmente de esta situación a las corporaciones locales y a los representantes de los trabajadores en los comités de empresa del Grupo y, en particular, en lo concerniente a eventuales embargos ocurridos que han originado bloqueos en cuentas corrientes y, a su vez, retraso en el abono de las nóminas.

No obstante, el grupo empresarial garantizó que “el elevado importe económico pendiente de pago por parte de las corporaciones locales a las empresas del Grupo CAS así como las dificultades para el acceso al crédito en plena crisis económica no son obstáculo a su voluntad de cumplir todas sus obligaciones y pagos pendientes con los trabajadores, así como de esforzarse cada día en prestar sus servicios con la mayor calidad y eficiencia”.