La lluvia que cae durante toda este jueves por la mañana sobre la vertiente Norte de Gran Canaria está ayudando mucho a controlar el incendio desatado este miércoles en la cumbre de la isla, pero al mismo tiempo impide que todos los efectivos aéreos puedan actuar donde se lucha más insistentemente contra el fuego, en la vertiente Sur-Sureste de las zonas más altas de Gran Canaria, informan a Canarias Ahoradesde el Cabildo de Gran Canaria.
El fuego, que ha afectado a unas 2.000 hectáreas, sigue sin estar controlado pero ya está perimetrado.
Los trabajos preventivos realizados durante todo el año por los miembros de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria en la cumbre de la isla evitaron que el incendio declarado hace ya una semana quemara entre 12.000 y 14.000 hectáreas, potencial que tenía el fuego. Unas llamas que llegaron a tener una propagación que rozó la deflagración y arrasó con todo lo que se le ponía por delante, según explicó el jefe de los equipos Presa del Cabildo de Gran Canaria, Federico Grillo, quien este miércoles reconstruyó en diversos rincones cómo se inició el incendio y cómo trabajaron los equipos de emergencia para poder controlarlo.
“Fue algo muy pocas veces visto en Gran Canaria. Esa propagación se parece a lo que se vio en La Palma el año pasado, se desparrama igual, también en Tenerife en 2007. Un incendio que es más bien una avalancha o un tsunami, algo imparable, es imposible ponerse delante de esto”, recalca.
Desde lo alto de la Cruz de Tejeda, lugar donde contemplaba el miércoles sobre las 14.00 horas la evolución del conato que terminó desarrollando el incendio que puso en jaque a la cumbre durante 72 horas, Grillo narra que al principio el incendio “no era grave”, pero todo comenzó a complicarse en cuanto “toca el barranco”, momento en el que se dispara. “Las primeras indicaciones eran prealertar a la Cruz de Tejeda para que estén atentos los turistas y los ganaderos”, finalmente se tuvo que desalojar este punto porque el fuego ascendió el barranco con una propagación muy rápida, conocida en el argot como blow up. “Es la misma situación que el incendio de La Gomera en 1984, una degollada, un collado donde canaliza muy bien los vientos, con un barranco por debajo y la propagación puede ser en minutos, roza casi la deflagración”, recalca el ingeniero forestal, que recuerda que al inicio las llamas llegaron a ser “una avalancha”, por lo que en una primera fase desalojaron incluso a las unidades de extinción.
La flora endémica de la cumbre de Gran Canaria, que incluye algunas plantas amenazadas que solo existen en esta isla, ha sufrido pocos daños en el incendio de los últimos días, no así el sotobosque, que ha sido pasto de las llamas y tardará de 10 a 15 años en recuperar su estado anterior.
Ese es el diagnóstico que hace el Jardín Canario Viera y Clavijo, centro del Cabildo de Gran Canaria asociado al CSIC, cuyos botánicos han estado en los últimos días examinando las poblaciones de plantas endémicas de las Islas que habitan en la zona dañada por el fuego.
Su director, Juli Caujapé, ha explicado este miércoles que dentro del desastre que ha ocasionado este incendio , con 2.700 hectáreas quemadas, “la buena noticia” para la flora es que las especies más amenazadas, por su escaso número de ejemplares, “van a escapar”.
Es el caso de la flor de mayo leñosa, dos de cuyos núcleos se vieron afectados, pero tienen perspectivas de regeneración.
“También la cresta de gallo de pinar de Gran Canaria se vio afectada parcialmente, pero creemos que la recuperación puede ser positiva y, en cualquier caso, en Jardín Canario contamos con semillas suficientes para intervenir si es necesario”, ha apuntado.
El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, Narvay Quintero, visitó en la mañana de este miércoles, junto al director general de Ganadería, David de Vera; el presidente del Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA), Juan Francisco Padrón, y el alcalde de San Mateo, Antonio Ortega, las zonas del interior de Gran Canaria afectadas por el último incendio forestal. Posteriormente, mantuvo un encuentro con el alcalde de Tejeda, Francisco Perera, así como con los ganaderos de la zona.
Quintero lamentó el fallecimiento de una mujer en el incendio y explicó que, dentro de los daños ocasionados, “hay varias explotaciones agrícolas y ganaderas, a las que, de forma coordinada entre todas las administraciones, deben dar una respuesta lo más rápida posible”. El consejero valoró la “colaboración entre Cabildo, ayuntamientos y Gobierno de Canarias que ya está en marcha para estudiar los daños y tramitar las ayudas que sean pertinentes”.
El consejero regional recordó el papel que puede jugar la ganadería como “agente de retirada de materiales vegetales de los montes de Canarias, combustible que favorece la propagación de los incendios, e insistió en la necesidad de ”integrar el pastoreo en la planificación territorial del Archipiélago, como ya hace la Ley del Suelo, que acaba de entrar en vigor“. Esta norma, añadió, ”permite usar para pastoreo suelos de protección agraria y paisajística, como actividad vinculada al sector y al paisaje“.
El alcalde de San Mateo, Antonio Ortega, ha expresado este miércoles su malestar por el hecho de que la Guardia Civil tardara en buscar a la mujer sueca que murió abrasada en el incendio de Gran Canaria con el argumento de que no había denuncia, algo que cree “inconcebible en una catástrofe”.
Ortega ha señalado que “casi tuvo que rogar” a la delegada del Gobierno en Canarias, Mercedes Roldós, que activara a la Guardia Civil, doce horas después de que el Gobierno de Canarias, a través del 112, estableciera un dispositivo de búsqueda de la vecina de San Mateo Carin Birgitta Ostman en el que figuraba el Instituto Armado.
Ortega ha expresado su “profunda tristeza por los daños” que ha provocado el incendio en su municipio y por la muerte de esta mujer en las proximidades de Los Llanos de Ana López, donde fue hallado su cuerpo carbonizado, dos días después de iniciarse el fuego.
El alcalde ha explicado que desde que la noche del jueves se confirmó que esta vecina no estaba en el albergue de Tunte, en San Bartolomé de Tirajana, el 112 organizó un rastreo de la zona, para lo que movilizó a Protección Civil, los Bomberos, Guardia Civil, la Policía Canaria en su busca, en la que también participaron los concejales del Ayuntamiento y él mismo.
El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha anunciado este miércoles que propondrá al pleno de la Corporación solicitar al Ministerio de Interior la concesión de la Medalla al Mérito de la Protección Civil a los equipos Presa y demás trabajadores de Medio Ambiente por el trabajo desempeñado durante el incendio de la cumbre de la isla.
Morales ha indicado a los periodistas que estos trabajadores “han dado el callo” y se han comportado como “jabatos” para evitar que el fuego declarado el miércoles y que ha acabado con la vida de una mujer y arrasado más de 2.700 hectáreas, tuviera “peores consecuencias para la isla”.
El presidente de la Corporación ha confiado en que el expediente para la concesión de esta distinción pueda estar concluido a tiempo, de manera que se pueda solicitar este reconocimiento en el pleno que celebrará la Corporación insular el próximo viernes.
La cumbre de Gran Canaria ha registrado las primeras horas de “humo cero”, ya que no ha habido incidencias ni reactivación de focos desde anoche tras el incendio declarado el pasado miércoles en la zona, según ha informado el Cabildo de la isla.
El área de Medio Ambiente de la Corporación insular ha detallado que durante la noche, en la que han trabajado 80 efectivos, solo ha habido una falsa alarma en Agualatente.
Durante la mañana de este martes se ha procedido al relevo de las unidades y a recorrer el perímetro afectado, de más de 2.700 hectáreas, lo que ha permitido declarar “humo cero” en la Cruz de Tejeda.
El Cabildo de Gran Canaria pone a disposición de la ciudadanía propietaria de explotaciones agrícolas y ganaderas afectadas por el fuego las solicitudes de reclamación y la información sobre el trámite de descripción de los daños registrados en sus negocios, informó el consejero de Soberanía Alimentaria, Miguel Hidalgo.
Los propietarios deben hacer constar en su solicitud los daños ocasionados por el fuego en fincas, cultivos, infraestructuras y ganadería, impreso al que deben acompañar la documentación requerida para avalar la actividad en sus explotaciones.
Los interesados podrán recoger el impreso y obtener la información del trámite en las Agencias de Extensión Agraria de la Isla, en los ayuntamientos de Tejeda y San Mateo y en la sede de la Mancomunidad de Medianías, así como descargar el documento de la web sectorprimario.grancanaria.com.
La zona donde se originó el incendio declarado el miércoles pasado en Gran Canaria ha registrado tres fuegos intencionados en el último año y medio, por lo que los investigadores sospechan que ha sido originado por una persona, una vez descartadas las posibles las causas naturales.
La investigación, en la que colaboran técnicos del Cabildo de Gran Canaria y la Guardia Civil, bajo secreto judicial, trata de determinar el punto exacto donde comenzó el fuego, una vez delimitada la zona de inicio, un área que se encuentra junto a un barranquillo que está detrás del Parador Nacional de Turismo de la Cruz de Tejeda, ha informado el responsable de la Brigada de Investigación de Incendios del Cabildo, Juan Carlos Santana.
Intencionado o no, en eso está la investigación, el incendio que ha afectado a unas 3.000 hectáreas en la cumbre de Gran Canaria se percibe de otra manera a vista de pájaro. Las imágenes aéreas captadas este fin de semana por Canarias Ahora, con el fuego controlado y en tareas de extinción, dan una idea de cómo ha arrasado sobre todo a ras de suelo, sin afectar tanto a las copas de los pinos o a las viviendas.
La Consejería de Política Territorial del Gobierno de Canarias destinará una primera ayuda de 500.000 euros para paliar los daños ambientales del “terrible” incendio ocurrido en las cumbres de Gran Canaria, que causó la muerte de una mujer y arrasó 2.780 hectáreas de pinar y monte bajo