Celestino Galván, hijo del extesorero de la Federación de Salud de Intersindical Canaria (IC) en Gran Canaria y primer imputado por el presunto desfalco en la caja del sindicato, ha asegurado este miércoles que realizó una transferencia de 4.000 euros desde una cuenta de la sectorial a una particular porque pensó que operaba “desde una cuenta privada” de su padre, Juan Jesús Galván, uno de los tres integrantes de Finanzas que tenía acceso a las claves.
El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Las Palmas de Gran Canaria, Rafael Passaro, ha tomado declaración este miércoles a Celestino Galván en el marco de la investigación sobre la supuesta apropiación indebida y el desvío de fondos de la Federación de Salud de IC a cuentas particulares para el pago de hipotecas, vacaciones, conciertos o préstamos personales.
El imputado ha reconocido que realizó esta transferencia y que, para ello, necesitó las tarjetas de coordenadas de su padre (que la tenía “a mano”), y de Begoña Santana, exsecretaria de Organización.
Galván explicó que cuando hizo esta operación no sabía que operaba desde la cuenta del sindicato porque estaba a nombre de su padre y aseguró que no se percató de que una de las tarjetas no correspondía a su progenitor porque “estaba nervioso y apurado” al realizar el movimiento. También admitió que estaba pasando un mal momento y que tenía deudas.
Según declaró ante el juez, Galván ha devuelto el dinero sustraído de las arcas del sindicato.
Irregularidades en la tesorería
El Juzgado de Instrucción 2 de la capital abrió las diligencias tras la presentación de hasta cuatro denuncias por parte de afiliados del sindicato, la mayoría de ellos integrantes de distintos órganos de dirección, que detectaron una serie de irregularidades en la tesorería de la sectorial de Salud. Un peritaje encargado por la propia IC determinó que solo en el año 2012 se habían detraído cerca de 26.000 euros de las cuentas de la Federación.