La recién remodelada playa de Tauro, conocida ahora como Anfi Tauro, vuelve a ser noticia, aunque esta vez nada tiene que ver con las presuntas irregularidades cometidas durante sus transformación de una playa de callaos a una playa de arena rubia saharaui.
Esta vez el protagonismo lo ha traído la inundación de las viviendas próximas a la arena y que han sido inundadas debido a las últimas pleamares. En total se han visto afectadas cinco casas y uno de los bares situados en la primera línea, según apunta este mismo viernes La Provincia.
Las primeras inundaciones tuvieron lugar en la madrugada del miércoles al jueves en la pleamar de las 03.00 horas, llegando el agua a la altura de las rodillas. La situación empeoró con la segunda marea alta, sobre las 15.15 horas, que alcanzó una cota mayor que la de la madrugada e hizo que el agua volviera a recorrer el camino desde la primera línea de la costa hasta las casas y el bar que se encuentra pegado a la playa.
En los trabajos de achicamiento del agua trabajaron efectivos de Protección Civil de Mogán y los bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria del parque de Puerto Rico.
El motivo de estas inundaciones se debió a que con la obra realizada por Anfi se eliminó la barrera de piedras que evitaba la llegada del agua, por lo que la empresa, tras ser requerido por el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) del Gobierno de Canarias, tuvo que construir un muro de contención que frenara provisionalmente la acción las aguas, aunque no se obtuvo una respuesta inmediata, por lo que finalmente se creó una barricada que alcanzó los dos metros de alto y otros 20 de ancho.
Y todavía quedan las mareas del Pino en septiembre.