Juventudes Socialistas considera una “provocación” la misa en homenaje a Franco en Tenerife

Las Juventudes Socialistas de Tenerife han calificado de “provocación” la misa en recuerdo a Franco celebrada este miércoles en la iglesia de San José de la capital tinerfeña y han exigido al Obispado que prohíba este tipo de actos, que a su juicio se han convertido en un homenaje al dictador.

La organización juvenil del PSOE subraya que es “inconcebible” que un Estado democrático permita la “alabanza de los personajes que han manchado la historia de España”, y añaden que no entiende la aprobación de la curia a estos encuentros, contrarios a los valores humanos “que supuestamente promueve la iglesia”.

Los jóvenes socialistas exigen al Obispado de Tenerife el rechazo a este tipo de actos, así como la desautorización y prohibición de los mismos en recintos dependientes de la diócesis nivariense. Una misa que se ha celebrado de forma periódica en la iglesia de San José, lo que históricamente ha generado un gran malestar en el barrio de El Toscal.

“Este encuentro anual siempre ha sido duramente contestado por parte de los colectivos sociales, que se concentran a las puertas de la iglesia para exigir el cese de estos homenajes al dictador”, sostienen.

Ante estos actos “fascistas” y “antidemocráticos apoyados por la Iglesia”, las Juventudes Socialistas reivindican un Estado laico, que promueva su memoria democrática y que no permita la exaltación ni reivindicación de la figura del dictador ni de su órbita.

Asimismo, reivindican la necesidad de la finalización de los trámites parlamentarios dirigidos a la ilegalización de la Fundación Nacional Francisco Franco, organizadora de la misa, y aprovechan para reivindicar la retirada del monumento a Franco de las calles de Santa Cruz.

Asimismo, las Juventudes Socialistas rechazan la existencia de la FNFF por no tener cabida en el ordenamiento jurídico español y celebran el impulso parlamentario dado por el PSOE para acelerar la prohibición de la misma.

Las Juventudes Socialistas remarcan que este tipo de homenajes “no son cosa del pasado” y alertan de que ponen en peligro la convivencia pacífica en España.

Por ello, subrayan la necesidad de que la sociedad se una para rechazar que “cada 20 de noviembre banderas preconstitucionales e himnos cargados de odio se vean en las calles de nuestro país”.