La COVID-19 ha dejado exhaustos a los centros de atención primaria de Canarias. Sin embargo, el virus solo empeoró una situación que desde hace tiempo ya estaba deteriorada. El Sindicato Médico Canario, a través de sus exponentes de Las Palmas y Tenerife, y en consonancia con la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), ha intensificado su campaña en defensa de los médicos de la denominada puerta de entrada al sistema de salud. Para ello, los profesionales han reivindicado a través de un comunicado la aplicación de “carácter urgente” de siete medidas.
Los médicos de este área piden, por un lado, una inversión destinada a “medidas inmediatas que permitan la sostenibilidad económica y funcional” y evitar así que, ante otra crisis como la pandemia, no se vuelvan a ver las costuras del sistema.
El sindicato también exige que las agendas cuenten con un máximo de 25 pacientes diarios (incluyendo citas virtuales y a domicilio). Se podrían sumar otras cinco citas, que podrán ser gestionadas únicamente por los médicos y que quedarían como reserva de citas para la gestión de los fuera de horas en centros sin incidencias, Incapacidad Laboral Temporal (ILT) o tratamientos que no sean demorables, citas telefónicas que se conviertan en presenciales o algún otro tipo de acto médico. Es decir, el sindicato acepta, a lo sumo, 30 pacientes por médico al día.
Otra de las medidas “urgentes” que pone sobre la mesa es la implantación de una gestión adecuada de los fuera de horas, como, por ejemplo, ir familiarizándose con la figura del médico de incidencia o similar (médico de refuerzo), el triaje de enfermería y administrativo y la adecuada gestión de citas.
Los médicos de atención primaria piden, asimismo, la correcta aplicación de la Instrucción 20/20 de la Dirección del Servicio Canario de la Salud (SCS) en todas sus posibilidades: desde ausencias, listas de espera, hasta refuerzos de incidencias en el Servicio Normal de Urgencias.
Mejorar y horizontalizar las relación entre el servicio de atención primaria y el de la atención hospitalaria es otra de los requisitos, así como adaptar el número de médicos de los Servicios Normales de Urgencias, del Servicio Especial de Urgencias y los de incidencia a las necesidades reales. Horizontalizar y complementar la relación entre Atención Primaria (AP) y Atención Hospitalaria (AH).
Finalmente, el Sindicato Médico Canario considera importante el aumento retributivo a los médicos de atención primaria y los residentes (MIR), que permita que se llegue a un salario que sea el doble del actual en cinco años.