La clase trabajadora de Canarias se sigue empobreciendo, y esto ocurre por varios motivos, se sabe, aunque dentro del ámbito laboral hay dos factores decisivos: los salarios percibidos, los netos o líquidos (los que se reciben en la cuenta bancaria), que crecen a muy bajo ritmo, el 1,5% en el último año (con 13,94 euros de coste salarial por hora efectiva, el registro más bajo del país), y luego esta que, mientras eso ocurre, el comportamiento de los precios que rigen en el día a día; o sea, la evolución de la inflación, que se mide con la variable Índice de Precios al Consumo (IPC), se eleva el 3,5% en su indicador general en el archipiélago.
Ese incremento anual del salario medio, calculado del primer trimestre de 2023 al mismo periodo de este 2024, es el percibido por un trabajador de las islas al mes (coste salarial de las empresas), que no debe ser confundido por el coste laboral (que además incluye retenciones del IRPF y cotizaciones a la Seguridad Social, sobre todo, el conocido como salario bruto). Tal promedio se sitúa como el segundo más bajo por comunidades autónomas en España, según la Encuesta Trimestral de Coste Laboral de enero-marzo de 2024, publicada este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Aquel registro para Canarias, ya habitual o común, solo es mejor que el de Andalucía (1,2% anual), a lo que se une, por si fuera poco, que en el archipiélago se pagan los salarios más bajos del país, solo un poco más ventajosos que los de Extremadura, la región que se halla en el último puesto. Por lo tanto, poca cosa nueva en la evolución de los emolumentos abonados a los empleados isleños, y así ocurre desde hace ya algunos años.
En Canarias se pagaron salarios medios por mes y persona contratada de 1.813,23 euros, el 1,5% más que 12 meses antes, mientras que en Extremadura, donde sí han subido más, llegan a la cota de 1.755 euros (último lugar), con un alza del 7,5% anual, la mayor en la clasificación por autonomías.
Con esa mejora neta en los salarios de los canarios y las canarias, se puede afirmar que la clase trabajadora de las islas se sigue empobreciendo pues las alzas en las cuantías de las nóminas que se ingresan no llegan a compensar ni la mitad del encarecimiento del coste de la vida, que, medido según el IPC de Canarias hasta marzo pasado y en tasa interanual, fue del 3,5%, dos puntos porcentuales más que la subida salarial media y con mayor empuje en los precios de la cesta de la compra, el grupo de los alimentos y las bebidas no alcohólicas (más 5,6% anual y el 32% desde 2021). Así las cosas, cabe decir que la pobreza salarial sigue siendo un hecho, una realidad, en el archipiélago.
A escala nacional, el salario medio en el primer trimestre de 2024 alcanzó la cifra de 2.206,1 euros por mes, con un alza del 3,7% anual. La comunidad autónoma con ese nivel más elevado en España fue Madrid, con 2.778,3 euros y el 4,7% de incremento anual, seguida de País Vasco (2.460,3), Cataluña (2.398,1) y Navarra (2.287,7), con más 1,9% de subida, más 4,2% y más 4,1%, respectivamente.
La carga salarial de las empresas en España
En el componente de coste laboral, que equivale a salario bruto o gasto de las empresas en sus nóminas, hay que decir que casi nada cambia en relación con las posiciones obtenidas por Canarias en la variable coste salarial, pues vuelve a ser en ese registro la segunda peor comunidad autónoma, otra vez con Extremadura última, y con parámetro absoluto de coste laboral al mes en las islas de 2.517,1 euros, solo por delante, como se ha dicho, de los 2.428,05 de la última región, la extremeña.
Atendiendo a esos datos estadísticos, se puede afirmar que Canarias sigue siendo la segunda comunidad autónoma de España donde más barato resulta formalizar un contrato, siempre según la Encuesta Trimestral de Coste Laboral del primer trimestre de 2024, servida este martes por el INE.
Si se compara el comportamiento de Canarias con el de Baleares, se observa que en las islas mediterráneas cuesta más el recurso humano, con un coste laboral de 2.966,4 euros por mes (lo que paga la empresa en total), lo que luego se traduce en un coste salarial, el líquido a percibir por el trabajador, 375 euros más alto que el de un canario, debido a que en Baleares el salario neto llega a 2.188,12 euros, tras subir en un año el 7,5%, por solo el 1,5% de lo ocurrido en Canarias.
En el archipiélago le cuesta a un empresario el contrato laboral unos 500 euros menos que el promedio reflejado para España, en 3.009,9 euros por mes, con un alza anual en el país del 3,9%, que solo es del 2% en Canarias, donde el coste laboral por hora efectiva es el más bajo de todos, en 19,35 euros.