La rotura del cono principal del volcán de La Palma crea auténticas “avenidas de lava” que nutren la colada primigenia y hacen crecer la fajana

Karen Estévez

25 de octubre de 2021 14:55 h

0

El volcán de La Palma, que aún no tiene nombre, sigue sin dar tregua seis semanas después de que se iniciara la erupción. De hecho, ahora parece más activo y fuerte que nunca. El director del Plan de Emergencia Volcánica de Canarias (Pevolca), Miguel Ángel Morcuende, ha explicado este lunes, después de la reunión del comité científico que, tras la modificación y reconfiguración que el cono principal sufrió este domingo, se han producido importantes desbordamientos que han creado auténticas “avenidas de lava”.

Los nuevos aportes de material magmático ocupan principalmente la colada primigenia o número 1, y la que está al norte de la montaña de Todoque, la 4. “El resto de las coladas están frenadas y prácticamente con poco aporte”, añadió Morcuende. El experto apuntó también que la colada nueva, la número 10, que se encuentra más al sur, está “detenida en Corazoncillo, justo delante de la zona de las placas fotovoltáicas”.

Según el director técnico del Pevolca, hay una serie de canales lávicos que están aportando energía a las coladas 1 y 4. “Esto hace que siga habiendo aporte de lava a la isla baja, contribuyendo a su crecimiento”, añadió. Asimismo, lamentó que en estas últimas 24 horas se estén rellenando aquellas zonas que se habían librado de las coladas, especialmente en el barrio de Alcalá.

Por su parte, la portavoz del comité científico del Pevolca, María José Blanco, declaró durante su intervención que en estos momentos “no se descarta la rotura de la parte superior del cono volcánico”, lo que causaría un mayor desastre.

La erupción volcánica parece ahora más vital, con una columna de cenizas que alcanza los 3,8 kilómetros y con unas emisiones de dióxido de azufre en torno a las 53.600 toneladas diarias.

Aumenta el tremor volcánico y la sismicidad

En la rueda de prensa posterior a la reunión del Pevolca, se destacó la intensificación del tremor volcánico. “Tenemos una gran salida de lava y esto ha provocado que la recolocación de todo el material que se encuentra en profundidad esté aumentando el tremor”, sentenció Miguel Ángel Morcuende.

La sismicidad en la zona intermedia (10 y 15 kilómetros) ha aumentado también. De hecho, este domingo, a las 16.30 horas (hora local), “hubo un pico muy importante en el que la sismicidad se elevó notablemente, apuntando incluso un sismo de magnitud 4 y sentido con intensidad IV, con epicentro a 10 kilómetros de profundidad”.

“Se produjo también un aumento de la sismicidad intermedia y profunda, con elevación de las magnitudes en la zona intermedia”, añadió este lunes a primera hora el Departamento de Seguridad Nacional (DSN). Así las cosas, hasta las 08:00 horas de este lunes se han producido al menos 90 terremotos, el de mayor magnitud, de 3,6, se registró en Fuencaliente, a 13 kilómetros de profundidad, sobre las 07.47 horas (hora canaria). Asimismo, casi todos los seísmos se han localizado entre este municipio y la Villa de Mazo, excepto uno, producido en Breña Alta a 34 kilómetros de profundidad, de magnitud 2,8 y sobre las 03:13 horas (hora canaria).

Más de 900 hectáreas afectadas

Hasta este domingo, la superficie afectada por la lava, que alcanzaba las 852,27 hectáreas, aumentó debido al derrame lávico del sur y a los huecos que se han rellenado en las zonas intermedias, mientras que la anchura máxima entre los puntos extremos de las coladas se mantiene en los 2.900 metros. Según el informe de Copernicus, hasta este domingo, a las 07.14 horas, el volcán había sepultado 901,2 hectáreas y destruido hasta 2.146 edificaciones.

Hasta ahora se ha dado albergue a 453 personas, 14 más que este domingo, 390 de ellas están en Fuencaliente y 63 en Los Llanos de Aridane. Además, anunció Morcuende, se ha abierto la carretera por El Charco, sobre las 13.00 horas, tras la limpieza de la carretera y el aseguramiento del talud.

Mejora la calidad del aire

La inversión térmica por encima de los 1.500 metros está favoreciendo la dispersión de gases en Los Llanos de Aridane, El Paso y Tazacorte, anotó el informe del DSN.

La concentración de partículas finas también ha mejorado tras la finalización del episodio de aire subsahariano. En cuanto al penacho de cenizas y dióxido de azufre, su disposición actual suroeste supone un escenario favorable para la operatividad de los aeropuertos.

En la rueda de prensa posterior a la reunión del Pevolca, se apuntó que las particulares menores de 10 micras se encuentran en estos momentos por debajo de la media diaria en todas las estaciones de vigilancia en La Palma, menos en Los Llanos. Asimismo, se indicó que la ceniza fina en suspensión puede llegar en esta jornada hasta El Hierro.