Varios familiares de víctimas del vuelo JK 5022 de Spanair, siniestrado el 20 de agosto, han confirmado, que la compañía, cuatro días después les negó que un fallo de configuración del avión pudiera ser la causa de la catástrofe, como recoge el borrador del informe preliminar sobre el que trabaja la Comisión de Investigación sobre el accidente puesta en marcha por el Ministerio de Fomento.
“Lo que se dice ahora es lo que se dijo en un principio”, afirman tras leer lo que se publica este martes en todos los periódicos de tirada nacional y regional. “El avión pudo subir engañado cuando le desconectaron el calentador de la sonda” y así se lo hicieron saber a los responsables de Spanair con los que se reunieron cuatro días después de la catástrofe en el Hotel Auditorium de Madrid.
En ese momento, la compañía dijo que “entendía que eso no había ocurrido así”. Sin embargo, “se empieza a confirmar que eso pudo haber engañado el resto del funcionamiento de los flats y los motores y en el momento del despegue el avión percibió que ya estaba en altura, volando”. Estas primeras conclusiones preliminares “le dan importancia a algo que parecía en un principio que no la tenía”, añaden.
No obstante, los representantes de Spanair explicaron a los familiares que el optar “por desconectar y no cambiar la pieza, no influyó en la siguiente maniobra de despegue”. El MD82 que operaba el vuelo JK 5022 de Spanair volvió al finger tras iniciar la maniobra de despegue al detectar el comandante que un sensor de temperatura no funcionaba correctamente. Allí permaneció desde las 13.42 a las 14.24 horas del 20 de agosto, tiempo en el que los mecánicos de la compañía decidieron “desconectar” siguiendo el protocolo habitual de funcionamiento en estas situaciones.
No obstante, los familiares mantienen la cautela sobre la responsabilidad de la compañía porque “tendrán que ser los jueces quienes la determinen”. Tienen claro que “no vamos a desconfiar del trabajo que desarrolla Spanair, los peritos, los abogados y los jueces” porque “no sería sensato”. Por el momento, se mantienen a la espera de los acontecimientos y “será un tribunal quien determine lo que ocurrió, no nosotros”, sentencian.