La Asociación Canaria de Industriales Tabaqueros rechaza la Directiva Europea de Productos del Tabaco y advierte de que la prohibición de exhibición abocará al “cierre” de muchos negocios porque se sumará a los efectos negativos del contrabando y el descenso de las ventas.
Los tabaqueros afirman en un comunicado que habrá pérdidas en la recaudación de impuestos en un “momento crítico”, a lo que habrá que sumar las inversiones para cambiar todo el mobiliario. El sector del tabaco en España genera 55.000 empleos, de los que 27.000 corresponden a puestos de trabajo en las expendedurías, de las que dependen en torno a 14.000 familias.
A su juicio, no hay “evidencias científicas” que demuestren que la ocultación del producto haga disminuir el número de fumadores, y ponen como ejemplo los casos de Canadá e Irlanda, donde se incrementaron del 11 al 13 por ciento y del 10 al 10,5 por ciento en los jóvenes, respectivamente. En Irlanda, además, los fumadores ocasionales pasaron del 1 al 3 por ciento.
En su opinión, si no se exhibe el tabaco, se dará “carta blanca” al contrabando y se tratará como “delincuentes” a los expendedores que venden un producto legal. Según sus cálculos, el contrabando ha pasado en España del 3 al 15 por ciento desde 2009, y en algunas provincias de Cataluña, Andalucía o Galicia, supera el 25 por ciento.
En esa línea, insisten en que la visibilidad del producto es una “práctica básica” en una sociedad de consumo ya que al consumidor no se le puede “negar” a ver lo que compra. “Quien entra en un estanco viene a comprar tabaco, no estamos fomentando el consumo. Son personas adultas que vienen expresamente a buscar su producto a nuestros establecimientos especializados”, señalan.